Por décadas las producciones mexicanas televisivas tuvieron como base el melodrama de la telenovela y los seriados antológicos con resoluciones moralinas y conservadoras. Las opciones de calidad narrativa empezaron a concentrarse en la licencia y difusión de series extranjeras. Sin embargo, en los últimos años, el florecimiento internacional de la televisión on demand ha mirado hacia Latinoamérica, en especial hacia México, campo fértil tanto en historias como en audiencias.

En el evento “Vive Netflix” celebrado en agosto de 2017 en la Ciudad de México, el jefe de Contenidos de Netflix, Ted Sarandos, habló sobre la importancia de enfocar más producciones originales para Latinoamérica. “Los creativos locales están rompiendo paradigmas de lo que ha sido la forma de contar historias”, dijo al presentar los casi 50 títulos latinoamericanos que se encuentran en diversas etapas de producción para 2018. “Como parte de nuestra inversión expandida en esta región, estamos buscando creadores que sientan emoción por redefinir los límites del entretenimiento latinoamericano.”

Una de las series que será la carta fuerte de Netflix es Diablero, una historia sobrenatural mexicana en la que un trío de héroes poco convencionales intentan detener un evento catastrófico de consecuencias apocalípticas. Dirigida por J. M. Cravioto y Rigoberto Castañeda, este show se une a otros títulos mexicanos que han tenido éxito con el público internacional (como Club de Cuervos e Ingobernable) y a una creciente lista de producciones latinoamericanas que elevan las expectativas (la estadounidense-colombiana Narcos, la brasileña 3% y la argentina Edha).

A nivel local, Televisa intentó competir con Netflix con Blim, una plataforma online cuyo catálogo incluía títulos propios además de la base de contenidos de su enorme archivo. Fue creada tras el anuncio de Televisa de retirar sus contenidos de Netflix en 2016. Esta plataforma no despegó con la potencia esperada debido a la poca originalidad y calidad de sus producciones propias, títulos que eran demasiado similares a lo que su audiencia estaba ya acostumbrada a ver libre de pago. Así era imposible competir con Netflix.

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La televisora tardó un par de años en decidir que lo mejor sería una alianza con un gigante: Amazon. En febrero pasado, Televisa anunció la creación de Televisa Alternative Originals (TAO), división con la que producirá contenidos premium cuya distribución corresponderá a Amazon Prime Video. La primera de estas series es Diablo guardián, basada en el libro del mexicano Xavier Velasco. La serie de 20 episodios inaugurará este acuerdo. La alianza de Televisa con Amazon sepulta las posibilidades de crecimiento de su propia plataforma. Y aunque Amazon no había lanzado antes series latinoamericanas, Diablo guardián podría convertirse en el caballo de batalla que muestre el potencial de los contenidos latinoamericanos para cautivar audiencias en los más de 200 países donde tiene alcance.

Finalmente, otra plataforma on demand que comienza a tener popularidad es FOX Premium. Hace unas semanas lanzó la serie mexicana Aquí en la Tierra, creada por Gael García Bernal y el cineasta Kyzza Terrazas (Somos lengua). Cuenta con ocho episodios que pueden verse directamente en la app y que exploran la corrupción y el crimen en las altas esferas de poder mexicanas. Su elenco incluye a los actores Daniel Giménez Cacho, Tenoch Huerta y el propio García Bernal. Aquí en la Tierra se presentó en la primera edición de Canneseries, el Festival Internacional de Series de Cannes, donde fue ovacionada.

Ya sea por financiamiento extranjero, local o multinacional, los creativos mexicanos están llevando narrativas interesantes a públicos internacionales a través de las plataformas de streaming. Estamos viendo la infancia de la televisión on demand mexicana, la opción de ver la creatividad mexicana a nivel internacional, habrá que seguirle el paso a sus creadores para verla florecer.