Mientras la despenalización del aborto ganaba terreno en México, en Estados Unidos pasaba lo contrario, poniéndole fin a casi cincuenta años de derecho al aborto, tras la anulación del caso Roe contra Wade. Desde entonces, activistas de asociaciones como Las Libres y Necesito Abortar han ayudado a personas del lado estadounidense a obtener píldoras abortivas, especialmente a las poblaciones migrantes vulnerables a las que se les ha impedido el acceso.