La decoración, la música, la ambientación, una plática cautivadora y ese último brindis con Tequila 1800… Un gran anfitrión sabe que son muchos los elementos necesarios para que un evento perdure en la memoria de los invitados y, sobre todo, que lo importante está en los detalles. ¿Luces altas o tenues?, ¿música up-tempo o tranquila?, ¿cuál es el mejor atuendo?, ¿qué servir en la cena? ¿El tequila derecho o en coctel? En su búsqueda por garantizar la mejor experiencia, quien convida selecciona todos estos detalles que forman una velada inolvidable.

A los invitados se les recibe en la puerta, se les hace sentir en casa y se busca para ellos calidad y sofisticación desde el primer trago. El novelista y caballero inglés Kingsley Amis, experto en el arte de las veladas, mencionaba al tequila como una de sus “bebidas reales”. 

Este destilado es idóneo para arrancar la noche. Tequila 1800 Cristalino hace que el anfitrión se luzca con el coctel de bienvenida. Por su sabor suave, con toques de nuez y cítricos, y su sutil aroma a roble con toques de vainilla, es ideal para elaborar mixología basada en frutos tropicales y para acompañar platos frescos y ligeramente condimentados.   

Para abrir el apetito, se ofrece Tequila 1800 Blanco, preferiblemente derecho en copa, aunque también se puede apostar por un coctel cítrico. Un buen trago detona conversaciones memorables, con anécdotas y datos fascinantes, como que en 1876, Tequila 1800 ya exportaba destilados de México a Europa y que 1800 es la línea de tequila más premiada de la historia, con casi cuarenta galardones. 

La cena es el epítome del esfuerzo del anfitrión y el momento en que los invitados deben quedar impresionados y complacidos. En un ambiente cálido y con música que permita la conversación, una mesa espectacular siempre quedará en la memoria: flores, la distinción de un menú impreso, fina cristalería, cerámica artesanal y, por supuesto, una gran cena. 

Los platos fuertes y condimentados, como las carnes rojas o el mole, deben maridarse con la ligereza y los aromas frutales y herbales de Tequila 1800 Añejo, el más premiado de la historia debido a su gran sabor. 

Uno de los momentos más dulces de la noche se acompañan con 1800 Milenio. Postres como el pastel de nuez, el fondant de chocolate, el crème brûlée y la tarta de higos se acompañan con este destilado extra añejo terminado en barricas de roble francés, usadas para la maduración de coñac. Derecho en copa tequilera, esta bebida no solo acompaña puros de intensidad media como digestivo, sino que da fin a una velada memorable.

Con la copa en alto, el anfitrión dedica unas palabras y agradece a quienes lo han acompañado. Prestar atención a todo lo que sucede y cuidar cada detalle vale la pena.

A continuación te compartimos tres recetas de Tequila 1800 para que destaques entre tus invitados como un gran anfitrión: 

Mixología para la bienvenida:

Cristalino tropical

• 45 ml. de Tequila 1800 Cristalino
• 1 cucharada de azúcar mascabado
• 25 ml. de limón verde
• 40 ml. de jugo de piña
• Té de manzanilla
• Top de agua quina
• Hielo triturado
• Hoja de piña

Margot

• 45 ml. de Tequila 1800 Blanco
• 2 cucharadas de azúcar
• 30 ml. de limón verde
• 30 ml. de aperitivo italiano (Aperol)
• Escarcha de azúcar y cítricos

Para la cena:

Not an Old Fashioned

• 60 ml. de Tequila 1800 Añejo
• 1 cucharada de azúcar mascabado
• 1 dash de bitter de chocolate
• 1 twist de naranja

Para más información consulta: mx.1800tequila.com