Una pandemia somete al mundo y los desastres naturales incrementan frecuencia y fuerza. Ya empezó la sexta extinción masiva. En las manos de los humanos está que el mundo permanezca habitable. Estos son los proyectos sustentables que se dedican a tomar medidas para remediar el cambio climático y los efectos que ha tenido en el planeta. Proyectos que son un rayo de esperanza y dan pistas de cómo las cosas se pueden hacer de manera diferente y muy bien.

Cultiva: alternativa de regeneración

Esta es una incubadora de proyectos de regeneración socio-ambiental en comunidad, establecida en el estado de Yucatán. El proyecto está conformado por cuatro mujeres especializadas en la creación de comunidades, sustentabilidad ecológica, psicología y sociología, que buscan darle luz a proyectos comunitarios que son lógicos con los ecosistemas y la Tierra.

Cultiva también desarrolla sus propios proyectos. Durante los meses en los que la COVID-19 ha dejado sin trabajo y recursos a muchísimas personas, desarrolló un proyecto de implementación de Solares Mayas, que es el nombre que tienen los tradicionales huertos de patio que circundan a las típicas casas maya, que tienen el propósito de darle sustento a las familias. “Nuestro proyecto ofrece un modelo para resolver integralmente varias problemáticas: la falta de oportunidades locales de desarrollo económico para mujeres, la seguridad alimentaria, la revalorización del territorio y prácticas culturales, y con esto la necesidad de crear una nueva cultura desde el seno familiar que favorezca la economía local y el uso sostenible del hábitat”, se lee en la página de la organización.

Cultiva es una iniciativa poderosa y motivada que cree en el trabajo comunitario como herramienta esencial para restablecer el orden ecológico.

Unitierra

La Universidad de la Tierra, Unitierra, es un espacio creado por un colectivo que promueve espacios de encuentro, aprendizajes, reflexión y acción, con la inquietud de aprender colectivamente. Tanto la universidad como el colectivo son adherentes a la Sexta Declaración de la Selva Lacandona y caminamos con la propuesta del Consejo Indígena de Gobierno y del Congreso Nacional Indígena en Oaxaca.

Fue establecida en el 2001 después de que el colectivo llegó al acuerdo sobre la importancia de compartir el conocimiento y de la necesidad de continuar con la escuela, más allá de la primaria y secundaria, que en la comunidad era un sistema rural. El proyecto tiene como centro mostrar formas de vida que no dependan de los mercados y las tendencias globales de economía. Los ejes de enseñanza se forman de acuerdo a los intereses de los estudiantes. Así, por ejemplo, en algún momento se enseñó cómo hacer huertos urbanos. También se han dado muchos talleres y clases sobre salud y remedios naturales para complementarlos a los estudios alópatas.

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Ríos Limpios

Este es un proyecto sustentable fundado en 2018 que nace de la creciente preocupación por la crisis medioambiental. La contaminación del agua es uno de los factores que más daños ha causado y, también, que se puede revertir con cierta facilidad desde la individualidad. Por eso Ríos Limpios ha emprendido una enorme tarea de reunir gente y limpiar los cuerpos de agua.

Los objetivos principales de la asociación es retirar residuos sólidos que no pertenecen, biorremediar los cuerpos de agua, recuperación de espacios, reconstrucción del tejido social y la formación de agentes de cambio.

En los dos años que llevan trabajando han organizado 48 brigadas de limpieza de ríos en las que han sacado 143 toneladas de basura. Han reunido 95 metros cúbicos de PET reciclado y/o reusado; 1252 voluntarios y 93 agentes de cambio activos.

Pakaraima

Este proyecto sustentable tiene un acercamiento diferente al cuidado de la Tierra y la creación de conciencia. La fachada de Pakaraima es un festival de música, pero detrás de esa actividad hay una estructura de creación de conciencia, reforestación e integración comunitaria.  

Trabajan en cuatro etapas, empezando con el festival, que sirve como medio de recaudación de fondos, con los que realizan actividades de impacto, como la reforestación y la limpieza de ríos y lagos. Para cada una de estas actividades hacen un gran esfuerzo para convocar a voluntarios que asistan y comiencen a hacer un impacto positivo en la Tierra, además de que están en un constante esfuerzo de crecer la comunidad, para que cada vez el trabajo tenga mayor fuerza y los resultados sean mucho más poderosos.

ENDESU

Espacios Naturales y Desarrollo Sustentable A.C. (ENDESU) es una asociación civil con 25 años de historia. Se fundó con la misión de conservar, restaurar y promover el uso sustentable de los recursos naturales en México. “Desde el inicio nos propusimos formar un grupo de trabajo que dejara huella en el estado de conservación de nuestro capital natural”, se lee en su página.

En el tiempo que llevan trabajando han desarrollado más de 250 proyectos en México y los resultados se aprencian en la restauración y conservación de bosques, selvas y humedales, en el cuidado a especies en peligro de extinción, en el trabajo con los dueños de las tierras para el aprovechamiento sustentable de los recursos naturales y en la creación de proyectos bien fundados que perduren más allá de los sexenios.

Rennueva

Este proyecto fue creado por egresados de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Autónoma de México, que desarrollaron la primera máquina mexicana que recicla unicel de forma eficiente.

El unicel es uno de los derivados del petróleo más polémicos, pues aunque es extremadamente barato de producir y consumir, el impacto ambiental que tiene es profundo, pues no es biodegradable y emite una serie de residuos altamente tóxicos. Este proyecto tiene la intención de generar una economía circular, que le da nueva vida a lo que parecía ya ser basura. Son la única empresa dentro de la Ciudad de México con autorización ambiental por la SEMARNAT y la SEDEMA para el reciclaje de residuos de poliestireno.

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