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El inmenso y espectacular Mar de Cortés contemplado desde la playa de Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, en San José del Cabo, B.C.S. © Zadún, a Ritz-Carlton Reserve.
En Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, donde el desierto besa el mar, cada susurro del viento y cada rayo de sol cuentan historias de millones de años. Aquí, el lujo se entrelaza con la naturaleza, creando un refugio para el alma inquieta en busca de serenidad.
Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, es un refugio de lujo situado en un entorno natural esculpido durante millones de años. Este paraíso terrenal se encuentra enclavado en una antigua reserva natural, donde el tiempo y la naturaleza han creado un paisaje de incomparable belleza. Con vistas al Mar de Cortés, una joya marina de biodiversidad, Zadún ofrece una experiencia inigualable que combina la majestuosidad del océano con la serenidad del desierto.
El Mar de Cortés, conocido como el Acuario del Mundo, despliega una paleta de azules que hipnotiza a los visitantes. Este cuerpo de agua alberga una rica variedad de vida marina, desde coloridos peces tropicales hasta majestuosas ballenas, creando un espectáculo natural que cautiva a cada visitante. La belleza submarina es sólo igualada por la fascinante fauna desértica que rodea la reserva. Aquí, en el desierto de Baja California, la flora y fauna coexisten en una danza de vida resiliente, donde cactus centenarios y especies endémicas narran historias de adaptación y supervivencia.
En medio de esta espléndida reserva, las villas de Zadún se erigen como refugios de privacidad y lujo. Cada villa ha sido diseñada para ofrecer la máxima comodidad y tranquilidad, permitiendo a los huéspedes sumergirse en la paz del entorno natural sin renunciar a las comodidades modernas. La arquitectura se integra perfectamente con el paisaje, utilizando materiales y formas que respetan y realzan la belleza del entorno.
Su elegante diseño celebra el desierto y el mar con una serie de suites y villas modernas y elegantes, idealmente ubicadas a lo largo de las pendientes naturales del terreno. La propiedad también alberga una colección de residencias impecablemente diseñadas con 5 o 6 habitaciones, acceso directo a la playa y privacidad garantizada.
El tesoro mejor guardado de Zadún es su Gran Reserve Villa, una lujosa villa de dos pisos frente al mar, un refugio revitalizante y perfecto para aquellos viajeros que buscan alojamientos privados de estilo residencial, acompañados del inigualable servicio de Zadún. Con la visión de Uribe Krayer, Zadún exhibe una expresión moderna del diseño mexicano, resaltando la destreza de los artesanos de todo México. Dentro de la Grand Reserve Villa, los huéspedes encontrarán cinco habitaciones impecablemente diseñadas, vestidores, varios baños, terrazas al aire libre, gimnasio privado y más. La villa también cuenta con varias salas de estar, un área de comedor al aire libre y una cocina totalmente equipada, convirtiéndola en el espacio perfecto para relajarse con familiares y amigos mientras disfrutan de los impresionantes alrededores naturales.
Zadún ofrece numerosas opciones para que los huéspedes se conecten consigo mismos y la naturaleza, ya sea explorando los vibrantes ecosistemas del destino a través del programa Jean-Michel Cousteau’s Ambassadors of the Environment o disfrutando de tratamientos relajantes en el ídilico Spa Alkemia, en donde los huéspedes de Zadún están invitados a transformarse, renovarse y descubrir su lado más espiritual.
También te puede interesar el reportaje de Ricardo Hernández Ruiz: "Mar adentro está la sanación".
Desde su debut, Zadún ha sido reconocido como una de las principales experiencias de viajes de lujo del mundo. Es un hotel Forbes Five Star y fue designado como una propiedad con la certificación de 5 Diamantes de la AAA Diamond, que garantiza el máximo nivel de servicio y comodidad. Además, Zadún es parte del renombrado portafolio Ritz-Carlton Reserve: un conjunto de propiedades ubicadas en destinos exóticos y extensiones vírgenes del paraíso escondidas en los rincones más exquisitos del mundo, para los viajeros más exigentes que buscan un escape personalizado y significativo. Estos santuarios ofrecen entornos elegantes, relajados e íntimos que entrelazan sabores locales con un servicio altamente individualizado y una programación cuidadosamente curada, prometiendo un viaje inolvidable.
Zadún es también un destino culinario de primer nivel, con restaurantes de autor que estimulan los sentidos. Cada restaurante ofrece una experiencia gastronómica única, donde los chefs combinan ingredientes locales con técnicas culinarias innovadoras. Desde mariscos frescos del Mar de Cortés hasta creaciones gourmet inspiradas en la rica tradición culinaria de México, cada platillo es una obra de arte que celebra la riqueza de la tierra y el mar.
Fue en Humo, el restaurante insignia de Zadún, donde el chef Carlos Gaytán —el único chef mexicano con dos estrellas Michelin, una por el restaurante Mexique en 2013 y la segunda por HA’ en 2024— tomó la cocina en junio pasado para preparar una cena especial con varios platos de creaciones originales, como las carnitas de abulón servidas en una tetela rellena de frijoles negros, hoja santa y mousse de aguacate picante, o el chorizo de camarón servido como relleno de flores de calabaza junto con un delicioso puré de dátiles y salsa de pimientos rojos asados. El plato principal fue un corte Rib Eye acompañado de pan de masa madre y calabacitas baby asadas, con un baño de salsa blanca de fondue de queso Sainte-Maure. Para el cierre, el refinamiento culinario y lo tradicional se combinaron en un postre llamado Cocoatal, compuesto por chocolate de metate, puré de naranja, pastel de especias y sorbete de chocolate.
Entre los tiempos, la coctelería de Osvaldo Vázquez y Emily Arroyo alegró a los comensales con los Komospace: Tequila Komos, fresa, cítricos y vainilla; los Tzucorita: Komos Reposado, flor de saúco y limoncillo, y los Orendain Fashioned: Komos Extra Añejo, jarabe de maíz, Amaro Montenegro y limón.
Por la cocina de Humo han pasado antes otros talentosos chefs mexicanos como el Chef Diego Muñoz, el Chef David Castro y la mixología de Handshake Bar y Limantour.
En Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, cada momento es una celebración de la naturaleza y el lujo consciente. Este destino excepcional invita a los viajeros a reconectarse con la belleza natural y a disfrutar de una experiencia de privacidad y exclusividad que sólo se encuentra en los rincones más especiales del mundo.
En Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, donde el desierto besa el mar, cada susurro del viento y cada rayo de sol cuentan historias de millones de años. Aquí, el lujo se entrelaza con la naturaleza, creando un refugio para el alma inquieta en busca de serenidad.
Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, es un refugio de lujo situado en un entorno natural esculpido durante millones de años. Este paraíso terrenal se encuentra enclavado en una antigua reserva natural, donde el tiempo y la naturaleza han creado un paisaje de incomparable belleza. Con vistas al Mar de Cortés, una joya marina de biodiversidad, Zadún ofrece una experiencia inigualable que combina la majestuosidad del océano con la serenidad del desierto.
El Mar de Cortés, conocido como el Acuario del Mundo, despliega una paleta de azules que hipnotiza a los visitantes. Este cuerpo de agua alberga una rica variedad de vida marina, desde coloridos peces tropicales hasta majestuosas ballenas, creando un espectáculo natural que cautiva a cada visitante. La belleza submarina es sólo igualada por la fascinante fauna desértica que rodea la reserva. Aquí, en el desierto de Baja California, la flora y fauna coexisten en una danza de vida resiliente, donde cactus centenarios y especies endémicas narran historias de adaptación y supervivencia.
En medio de esta espléndida reserva, las villas de Zadún se erigen como refugios de privacidad y lujo. Cada villa ha sido diseñada para ofrecer la máxima comodidad y tranquilidad, permitiendo a los huéspedes sumergirse en la paz del entorno natural sin renunciar a las comodidades modernas. La arquitectura se integra perfectamente con el paisaje, utilizando materiales y formas que respetan y realzan la belleza del entorno.
Su elegante diseño celebra el desierto y el mar con una serie de suites y villas modernas y elegantes, idealmente ubicadas a lo largo de las pendientes naturales del terreno. La propiedad también alberga una colección de residencias impecablemente diseñadas con 5 o 6 habitaciones, acceso directo a la playa y privacidad garantizada.
El tesoro mejor guardado de Zadún es su Gran Reserve Villa, una lujosa villa de dos pisos frente al mar, un refugio revitalizante y perfecto para aquellos viajeros que buscan alojamientos privados de estilo residencial, acompañados del inigualable servicio de Zadún. Con la visión de Uribe Krayer, Zadún exhibe una expresión moderna del diseño mexicano, resaltando la destreza de los artesanos de todo México. Dentro de la Grand Reserve Villa, los huéspedes encontrarán cinco habitaciones impecablemente diseñadas, vestidores, varios baños, terrazas al aire libre, gimnasio privado y más. La villa también cuenta con varias salas de estar, un área de comedor al aire libre y una cocina totalmente equipada, convirtiéndola en el espacio perfecto para relajarse con familiares y amigos mientras disfrutan de los impresionantes alrededores naturales.
Zadún ofrece numerosas opciones para que los huéspedes se conecten consigo mismos y la naturaleza, ya sea explorando los vibrantes ecosistemas del destino a través del programa Jean-Michel Cousteau’s Ambassadors of the Environment o disfrutando de tratamientos relajantes en el ídilico Spa Alkemia, en donde los huéspedes de Zadún están invitados a transformarse, renovarse y descubrir su lado más espiritual.
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Desde su debut, Zadún ha sido reconocido como una de las principales experiencias de viajes de lujo del mundo. Es un hotel Forbes Five Star y fue designado como una propiedad con la certificación de 5 Diamantes de la AAA Diamond, que garantiza el máximo nivel de servicio y comodidad. Además, Zadún es parte del renombrado portafolio Ritz-Carlton Reserve: un conjunto de propiedades ubicadas en destinos exóticos y extensiones vírgenes del paraíso escondidas en los rincones más exquisitos del mundo, para los viajeros más exigentes que buscan un escape personalizado y significativo. Estos santuarios ofrecen entornos elegantes, relajados e íntimos que entrelazan sabores locales con un servicio altamente individualizado y una programación cuidadosamente curada, prometiendo un viaje inolvidable.
Zadún es también un destino culinario de primer nivel, con restaurantes de autor que estimulan los sentidos. Cada restaurante ofrece una experiencia gastronómica única, donde los chefs combinan ingredientes locales con técnicas culinarias innovadoras. Desde mariscos frescos del Mar de Cortés hasta creaciones gourmet inspiradas en la rica tradición culinaria de México, cada platillo es una obra de arte que celebra la riqueza de la tierra y el mar.
Fue en Humo, el restaurante insignia de Zadún, donde el chef Carlos Gaytán —el único chef mexicano con dos estrellas Michelin, una por el restaurante Mexique en 2013 y la segunda por HA’ en 2024— tomó la cocina en junio pasado para preparar una cena especial con varios platos de creaciones originales, como las carnitas de abulón servidas en una tetela rellena de frijoles negros, hoja santa y mousse de aguacate picante, o el chorizo de camarón servido como relleno de flores de calabaza junto con un delicioso puré de dátiles y salsa de pimientos rojos asados. El plato principal fue un corte Rib Eye acompañado de pan de masa madre y calabacitas baby asadas, con un baño de salsa blanca de fondue de queso Sainte-Maure. Para el cierre, el refinamiento culinario y lo tradicional se combinaron en un postre llamado Cocoatal, compuesto por chocolate de metate, puré de naranja, pastel de especias y sorbete de chocolate.
Entre los tiempos, la coctelería de Osvaldo Vázquez y Emily Arroyo alegró a los comensales con los Komospace: Tequila Komos, fresa, cítricos y vainilla; los Tzucorita: Komos Reposado, flor de saúco y limoncillo, y los Orendain Fashioned: Komos Extra Añejo, jarabe de maíz, Amaro Montenegro y limón.
Por la cocina de Humo han pasado antes otros talentosos chefs mexicanos como el Chef Diego Muñoz, el Chef David Castro y la mixología de Handshake Bar y Limantour.
En Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, cada momento es una celebración de la naturaleza y el lujo consciente. Este destino excepcional invita a los viajeros a reconectarse con la belleza natural y a disfrutar de una experiencia de privacidad y exclusividad que sólo se encuentra en los rincones más especiales del mundo.
El inmenso y espectacular Mar de Cortés contemplado desde la playa de Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, en San José del Cabo, B.C.S. © Zadún, a Ritz-Carlton Reserve.
En Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, donde el desierto besa el mar, cada susurro del viento y cada rayo de sol cuentan historias de millones de años. Aquí, el lujo se entrelaza con la naturaleza, creando un refugio para el alma inquieta en busca de serenidad.
Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, es un refugio de lujo situado en un entorno natural esculpido durante millones de años. Este paraíso terrenal se encuentra enclavado en una antigua reserva natural, donde el tiempo y la naturaleza han creado un paisaje de incomparable belleza. Con vistas al Mar de Cortés, una joya marina de biodiversidad, Zadún ofrece una experiencia inigualable que combina la majestuosidad del océano con la serenidad del desierto.
El Mar de Cortés, conocido como el Acuario del Mundo, despliega una paleta de azules que hipnotiza a los visitantes. Este cuerpo de agua alberga una rica variedad de vida marina, desde coloridos peces tropicales hasta majestuosas ballenas, creando un espectáculo natural que cautiva a cada visitante. La belleza submarina es sólo igualada por la fascinante fauna desértica que rodea la reserva. Aquí, en el desierto de Baja California, la flora y fauna coexisten en una danza de vida resiliente, donde cactus centenarios y especies endémicas narran historias de adaptación y supervivencia.
En medio de esta espléndida reserva, las villas de Zadún se erigen como refugios de privacidad y lujo. Cada villa ha sido diseñada para ofrecer la máxima comodidad y tranquilidad, permitiendo a los huéspedes sumergirse en la paz del entorno natural sin renunciar a las comodidades modernas. La arquitectura se integra perfectamente con el paisaje, utilizando materiales y formas que respetan y realzan la belleza del entorno.
Su elegante diseño celebra el desierto y el mar con una serie de suites y villas modernas y elegantes, idealmente ubicadas a lo largo de las pendientes naturales del terreno. La propiedad también alberga una colección de residencias impecablemente diseñadas con 5 o 6 habitaciones, acceso directo a la playa y privacidad garantizada.
El tesoro mejor guardado de Zadún es su Gran Reserve Villa, una lujosa villa de dos pisos frente al mar, un refugio revitalizante y perfecto para aquellos viajeros que buscan alojamientos privados de estilo residencial, acompañados del inigualable servicio de Zadún. Con la visión de Uribe Krayer, Zadún exhibe una expresión moderna del diseño mexicano, resaltando la destreza de los artesanos de todo México. Dentro de la Grand Reserve Villa, los huéspedes encontrarán cinco habitaciones impecablemente diseñadas, vestidores, varios baños, terrazas al aire libre, gimnasio privado y más. La villa también cuenta con varias salas de estar, un área de comedor al aire libre y una cocina totalmente equipada, convirtiéndola en el espacio perfecto para relajarse con familiares y amigos mientras disfrutan de los impresionantes alrededores naturales.
Zadún ofrece numerosas opciones para que los huéspedes se conecten consigo mismos y la naturaleza, ya sea explorando los vibrantes ecosistemas del destino a través del programa Jean-Michel Cousteau’s Ambassadors of the Environment o disfrutando de tratamientos relajantes en el ídilico Spa Alkemia, en donde los huéspedes de Zadún están invitados a transformarse, renovarse y descubrir su lado más espiritual.
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Desde su debut, Zadún ha sido reconocido como una de las principales experiencias de viajes de lujo del mundo. Es un hotel Forbes Five Star y fue designado como una propiedad con la certificación de 5 Diamantes de la AAA Diamond, que garantiza el máximo nivel de servicio y comodidad. Además, Zadún es parte del renombrado portafolio Ritz-Carlton Reserve: un conjunto de propiedades ubicadas en destinos exóticos y extensiones vírgenes del paraíso escondidas en los rincones más exquisitos del mundo, para los viajeros más exigentes que buscan un escape personalizado y significativo. Estos santuarios ofrecen entornos elegantes, relajados e íntimos que entrelazan sabores locales con un servicio altamente individualizado y una programación cuidadosamente curada, prometiendo un viaje inolvidable.
Zadún es también un destino culinario de primer nivel, con restaurantes de autor que estimulan los sentidos. Cada restaurante ofrece una experiencia gastronómica única, donde los chefs combinan ingredientes locales con técnicas culinarias innovadoras. Desde mariscos frescos del Mar de Cortés hasta creaciones gourmet inspiradas en la rica tradición culinaria de México, cada platillo es una obra de arte que celebra la riqueza de la tierra y el mar.
Fue en Humo, el restaurante insignia de Zadún, donde el chef Carlos Gaytán —el único chef mexicano con dos estrellas Michelin, una por el restaurante Mexique en 2013 y la segunda por HA’ en 2024— tomó la cocina en junio pasado para preparar una cena especial con varios platos de creaciones originales, como las carnitas de abulón servidas en una tetela rellena de frijoles negros, hoja santa y mousse de aguacate picante, o el chorizo de camarón servido como relleno de flores de calabaza junto con un delicioso puré de dátiles y salsa de pimientos rojos asados. El plato principal fue un corte Rib Eye acompañado de pan de masa madre y calabacitas baby asadas, con un baño de salsa blanca de fondue de queso Sainte-Maure. Para el cierre, el refinamiento culinario y lo tradicional se combinaron en un postre llamado Cocoatal, compuesto por chocolate de metate, puré de naranja, pastel de especias y sorbete de chocolate.
Entre los tiempos, la coctelería de Osvaldo Vázquez y Emily Arroyo alegró a los comensales con los Komospace: Tequila Komos, fresa, cítricos y vainilla; los Tzucorita: Komos Reposado, flor de saúco y limoncillo, y los Orendain Fashioned: Komos Extra Añejo, jarabe de maíz, Amaro Montenegro y limón.
Por la cocina de Humo han pasado antes otros talentosos chefs mexicanos como el Chef Diego Muñoz, el Chef David Castro y la mixología de Handshake Bar y Limantour.
En Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, cada momento es una celebración de la naturaleza y el lujo consciente. Este destino excepcional invita a los viajeros a reconectarse con la belleza natural y a disfrutar de una experiencia de privacidad y exclusividad que sólo se encuentra en los rincones más especiales del mundo.
En Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, donde el desierto besa el mar, cada susurro del viento y cada rayo de sol cuentan historias de millones de años. Aquí, el lujo se entrelaza con la naturaleza, creando un refugio para el alma inquieta en busca de serenidad.
Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, es un refugio de lujo situado en un entorno natural esculpido durante millones de años. Este paraíso terrenal se encuentra enclavado en una antigua reserva natural, donde el tiempo y la naturaleza han creado un paisaje de incomparable belleza. Con vistas al Mar de Cortés, una joya marina de biodiversidad, Zadún ofrece una experiencia inigualable que combina la majestuosidad del océano con la serenidad del desierto.
El Mar de Cortés, conocido como el Acuario del Mundo, despliega una paleta de azules que hipnotiza a los visitantes. Este cuerpo de agua alberga una rica variedad de vida marina, desde coloridos peces tropicales hasta majestuosas ballenas, creando un espectáculo natural que cautiva a cada visitante. La belleza submarina es sólo igualada por la fascinante fauna desértica que rodea la reserva. Aquí, en el desierto de Baja California, la flora y fauna coexisten en una danza de vida resiliente, donde cactus centenarios y especies endémicas narran historias de adaptación y supervivencia.
En medio de esta espléndida reserva, las villas de Zadún se erigen como refugios de privacidad y lujo. Cada villa ha sido diseñada para ofrecer la máxima comodidad y tranquilidad, permitiendo a los huéspedes sumergirse en la paz del entorno natural sin renunciar a las comodidades modernas. La arquitectura se integra perfectamente con el paisaje, utilizando materiales y formas que respetan y realzan la belleza del entorno.
Su elegante diseño celebra el desierto y el mar con una serie de suites y villas modernas y elegantes, idealmente ubicadas a lo largo de las pendientes naturales del terreno. La propiedad también alberga una colección de residencias impecablemente diseñadas con 5 o 6 habitaciones, acceso directo a la playa y privacidad garantizada.
El tesoro mejor guardado de Zadún es su Gran Reserve Villa, una lujosa villa de dos pisos frente al mar, un refugio revitalizante y perfecto para aquellos viajeros que buscan alojamientos privados de estilo residencial, acompañados del inigualable servicio de Zadún. Con la visión de Uribe Krayer, Zadún exhibe una expresión moderna del diseño mexicano, resaltando la destreza de los artesanos de todo México. Dentro de la Grand Reserve Villa, los huéspedes encontrarán cinco habitaciones impecablemente diseñadas, vestidores, varios baños, terrazas al aire libre, gimnasio privado y más. La villa también cuenta con varias salas de estar, un área de comedor al aire libre y una cocina totalmente equipada, convirtiéndola en el espacio perfecto para relajarse con familiares y amigos mientras disfrutan de los impresionantes alrededores naturales.
Zadún ofrece numerosas opciones para que los huéspedes se conecten consigo mismos y la naturaleza, ya sea explorando los vibrantes ecosistemas del destino a través del programa Jean-Michel Cousteau’s Ambassadors of the Environment o disfrutando de tratamientos relajantes en el ídilico Spa Alkemia, en donde los huéspedes de Zadún están invitados a transformarse, renovarse y descubrir su lado más espiritual.
También te puede interesar el reportaje de Ricardo Hernández Ruiz: "Mar adentro está la sanación".
Desde su debut, Zadún ha sido reconocido como una de las principales experiencias de viajes de lujo del mundo. Es un hotel Forbes Five Star y fue designado como una propiedad con la certificación de 5 Diamantes de la AAA Diamond, que garantiza el máximo nivel de servicio y comodidad. Además, Zadún es parte del renombrado portafolio Ritz-Carlton Reserve: un conjunto de propiedades ubicadas en destinos exóticos y extensiones vírgenes del paraíso escondidas en los rincones más exquisitos del mundo, para los viajeros más exigentes que buscan un escape personalizado y significativo. Estos santuarios ofrecen entornos elegantes, relajados e íntimos que entrelazan sabores locales con un servicio altamente individualizado y una programación cuidadosamente curada, prometiendo un viaje inolvidable.
Zadún es también un destino culinario de primer nivel, con restaurantes de autor que estimulan los sentidos. Cada restaurante ofrece una experiencia gastronómica única, donde los chefs combinan ingredientes locales con técnicas culinarias innovadoras. Desde mariscos frescos del Mar de Cortés hasta creaciones gourmet inspiradas en la rica tradición culinaria de México, cada platillo es una obra de arte que celebra la riqueza de la tierra y el mar.
Fue en Humo, el restaurante insignia de Zadún, donde el chef Carlos Gaytán —el único chef mexicano con dos estrellas Michelin, una por el restaurante Mexique en 2013 y la segunda por HA’ en 2024— tomó la cocina en junio pasado para preparar una cena especial con varios platos de creaciones originales, como las carnitas de abulón servidas en una tetela rellena de frijoles negros, hoja santa y mousse de aguacate picante, o el chorizo de camarón servido como relleno de flores de calabaza junto con un delicioso puré de dátiles y salsa de pimientos rojos asados. El plato principal fue un corte Rib Eye acompañado de pan de masa madre y calabacitas baby asadas, con un baño de salsa blanca de fondue de queso Sainte-Maure. Para el cierre, el refinamiento culinario y lo tradicional se combinaron en un postre llamado Cocoatal, compuesto por chocolate de metate, puré de naranja, pastel de especias y sorbete de chocolate.
Entre los tiempos, la coctelería de Osvaldo Vázquez y Emily Arroyo alegró a los comensales con los Komospace: Tequila Komos, fresa, cítricos y vainilla; los Tzucorita: Komos Reposado, flor de saúco y limoncillo, y los Orendain Fashioned: Komos Extra Añejo, jarabe de maíz, Amaro Montenegro y limón.
Por la cocina de Humo han pasado antes otros talentosos chefs mexicanos como el Chef Diego Muñoz, el Chef David Castro y la mixología de Handshake Bar y Limantour.
En Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, cada momento es una celebración de la naturaleza y el lujo consciente. Este destino excepcional invita a los viajeros a reconectarse con la belleza natural y a disfrutar de una experiencia de privacidad y exclusividad que sólo se encuentra en los rincones más especiales del mundo.
El inmenso y espectacular Mar de Cortés contemplado desde la playa de Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, en San José del Cabo, B.C.S. © Zadún, a Ritz-Carlton Reserve.
En Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, donde el desierto besa el mar, cada susurro del viento y cada rayo de sol cuentan historias de millones de años. Aquí, el lujo se entrelaza con la naturaleza, creando un refugio para el alma inquieta en busca de serenidad.
Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, es un refugio de lujo situado en un entorno natural esculpido durante millones de años. Este paraíso terrenal se encuentra enclavado en una antigua reserva natural, donde el tiempo y la naturaleza han creado un paisaje de incomparable belleza. Con vistas al Mar de Cortés, una joya marina de biodiversidad, Zadún ofrece una experiencia inigualable que combina la majestuosidad del océano con la serenidad del desierto.
El Mar de Cortés, conocido como el Acuario del Mundo, despliega una paleta de azules que hipnotiza a los visitantes. Este cuerpo de agua alberga una rica variedad de vida marina, desde coloridos peces tropicales hasta majestuosas ballenas, creando un espectáculo natural que cautiva a cada visitante. La belleza submarina es sólo igualada por la fascinante fauna desértica que rodea la reserva. Aquí, en el desierto de Baja California, la flora y fauna coexisten en una danza de vida resiliente, donde cactus centenarios y especies endémicas narran historias de adaptación y supervivencia.
En medio de esta espléndida reserva, las villas de Zadún se erigen como refugios de privacidad y lujo. Cada villa ha sido diseñada para ofrecer la máxima comodidad y tranquilidad, permitiendo a los huéspedes sumergirse en la paz del entorno natural sin renunciar a las comodidades modernas. La arquitectura se integra perfectamente con el paisaje, utilizando materiales y formas que respetan y realzan la belleza del entorno.
Su elegante diseño celebra el desierto y el mar con una serie de suites y villas modernas y elegantes, idealmente ubicadas a lo largo de las pendientes naturales del terreno. La propiedad también alberga una colección de residencias impecablemente diseñadas con 5 o 6 habitaciones, acceso directo a la playa y privacidad garantizada.
El tesoro mejor guardado de Zadún es su Gran Reserve Villa, una lujosa villa de dos pisos frente al mar, un refugio revitalizante y perfecto para aquellos viajeros que buscan alojamientos privados de estilo residencial, acompañados del inigualable servicio de Zadún. Con la visión de Uribe Krayer, Zadún exhibe una expresión moderna del diseño mexicano, resaltando la destreza de los artesanos de todo México. Dentro de la Grand Reserve Villa, los huéspedes encontrarán cinco habitaciones impecablemente diseñadas, vestidores, varios baños, terrazas al aire libre, gimnasio privado y más. La villa también cuenta con varias salas de estar, un área de comedor al aire libre y una cocina totalmente equipada, convirtiéndola en el espacio perfecto para relajarse con familiares y amigos mientras disfrutan de los impresionantes alrededores naturales.
Zadún ofrece numerosas opciones para que los huéspedes se conecten consigo mismos y la naturaleza, ya sea explorando los vibrantes ecosistemas del destino a través del programa Jean-Michel Cousteau’s Ambassadors of the Environment o disfrutando de tratamientos relajantes en el ídilico Spa Alkemia, en donde los huéspedes de Zadún están invitados a transformarse, renovarse y descubrir su lado más espiritual.
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Zadún es también un destino culinario de primer nivel, con restaurantes de autor que estimulan los sentidos. Cada restaurante ofrece una experiencia gastronómica única, donde los chefs combinan ingredientes locales con técnicas culinarias innovadoras. Desde mariscos frescos del Mar de Cortés hasta creaciones gourmet inspiradas en la rica tradición culinaria de México, cada platillo es una obra de arte que celebra la riqueza de la tierra y el mar.
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Entre los tiempos, la coctelería de Osvaldo Vázquez y Emily Arroyo alegró a los comensales con los Komospace: Tequila Komos, fresa, cítricos y vainilla; los Tzucorita: Komos Reposado, flor de saúco y limoncillo, y los Orendain Fashioned: Komos Extra Añejo, jarabe de maíz, Amaro Montenegro y limón.
Por la cocina de Humo han pasado antes otros talentosos chefs mexicanos como el Chef Diego Muñoz, el Chef David Castro y la mixología de Handshake Bar y Limantour.
En Zadún, a Ritz-Carlton Reserve, cada momento es una celebración de la naturaleza y el lujo consciente. Este destino excepcional invita a los viajeros a reconectarse con la belleza natural y a disfrutar de una experiencia de privacidad y exclusividad que sólo se encuentra en los rincones más especiales del mundo.
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