Las mujeres han dependido en mayor medida que los hombres del acceso a los recursos comunes y han estado más comprometidas con su defensa. Históricamente han liderado esfuerzos para colectivizar el trabajo reproductivo —piedra angular sobre la que se construye la sociedad— para protegerse de la pobreza, de la violencia estatal y de la ejercida por los hombres. Éste es un ensayo feminista sobre las luchas de nuestro tiempo.*