Greta Thunberg provocó un huracán en América Latina, cuando cientos de jóvenes se movilizaron para exigir que empresas y gobiernos detuvieran el cambio climático. Ahora, en medio de la pandemia, nada detiene su resistencia enmarcada por el movimiento Jóvenes por el Clima. En medio de los incendios y de la contaminación más brutal, estos estudiantes se han convertido en interlocutores para el poder político en sus respectivos países, a la vez que claman por un mejor planeta.
Nuestros países ya hablan de “ansiedad nacional”, mientras las cifras aumentan y cada uno vive su curva depresiva. Alguna farmacéutica encontrará productos para una generación a la que le venderán felicidad artificial, mascarillas sofisticadas, más miedo a la muerte, miedo a la otredad y ansiedad social ante el contacto humano. La pandemia de la depresión.