El cierre de la Línea 12 del Metro ha traído cientos de camiones, trolebuses, peseros y, ahora, se suma el Metrobús. La avenida Tláhuac no es sólo una vialidad congestionada, también es la zona cero, un sitio para recordar a los muertos y un foro de denuncias.
Aún hay mucho por mejorar en cuanto a la transparencia del presupuesto. En el caso del Metro, las categorías cambian, se vuelven menos específicas y no todos los gastos se justifican ante la ciudadanía, de modo que se oscurece la relación entre el dinero y la tragedia en avenida Tláhuac.