La moneda mexicana está viviendo su mejor momento desde 2016.
¿A qué se debe este repunte? Y ¿qué efectos podría tener en la economía?
Entre viviendas antiguas y modernas, venta ambulante, oficinas discretas, tiendas y papelerías, y el golpe de la reciente inflación a los alquileres, las colonias Obrera y Doctores viven cambios urbanos en sintonía a los tiempos que corren en las grandes ciudades.
El paquete económico que presentó el Ejecutivo no solo se basa en las estimaciones más optimistas (por ejemplo, que el PIB crecerá en 3% en 2023), el presupuesto de egresos también destina montos significativos a las pensiones para los adultos mayores y a pagar la deuda. Se puede decir que es un presupuesto inequitativo para las generaciones más jóvenes.
En cuanto a la inflación, hay buenas y malas noticias. Por un lado, el Banco de México ha logrado mantener estables las expectativas de inflación para los próximos años; por el otro, se espera que la inflación alta continúe en los siguientes doce meses. Si los precios siguen subiendo, podría haber una renegociación de salarios, con el riesgo de que se origine una espiral ascendente.
Esta es la primera vez que los jóvenes menores de treinta años viven una inflación anual mayor al 7%. Banxico mide las expectativas inflacionarias a través de encuestas a especialistas en finanzas y en economía, y a empresarios. Sin embargo, una encuesta a la población general sería muy valiosa.
Luego de la dura caída en la economía por la pandemia, México necesitaba recuperar el terreno perdido. Pero los pronósticos del Banco Mundial advierten que el crecimiento económico se recortará en más de una cuarta parte. Esto, sumado a la alta inflación, provocará más pobreza y desigualdad.
La inflación en México alcanzó su nivel más alto en veinte años y está afectando a miles de empresas y familias. ¿A qué se debe este fenómeno? y ¿cuánto más podría extenderse?