El último insulto
Enrique Peña Nieto cierra con broche de oro un sexenio oscuro.
Mañana México iniciará una nueva etapa en su historia. Andrés Manuel López Obrador tomará posesión como presidente, tras su tercer intento por ocupar la silla.
Pero antes de que eso ocurra hay que hacer un recuento de los daños que Enrique Peña Nieto deja tras de sí. Es evidente que ha sido uno de los presidentes que más dinero ha gastado durante su sexenio y se va dejándonos el mayor monto de endeudamiento en la historia mexicana al alcanzar 10 billones 427 mil 506.1 millones de pesos, según cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Deja también una reforma educativa que no tiene pies ni cabeza y que fue votada en cuestión de horas sin que muchos de los legisladores pudieran leer la propuesta y sin incluir a los maestros en las discusiones. La violencia criminal en nuestro país llegó a números récords, en el 2017 se cometieron 31,174 homicidios, una cifra que posicionó a México como el país más violento del continente ese año.
Por supuesto no podemos dejar fuera de este recuento a la corrupción que marcó este sexenio. Del tema podríamos escribir por días, o años, pero sin duda lo más sonado fue la Casa Blanca. Y si hablamos de Derechos Humanos, tampoco podemos resaltar nada positivo de este gobierno. Ya han pasado más de 4 años desde la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa y no han encontrado ni a las víctimas, ni a los responsables. Varias investigaciones fallidas han hecho que la credibilidad de las autoridades mexicanas se hunda cada vez más.
Pero a tan solo horas de que Enrique Peña Nieto se retire como uno de los presidentes con más escándalos en su sexenio, nos da una última probadita de lo que ya se ha vuelto tradición durante estos seis años. El pasado martes 27 de noviembre la Secretaría de Relaciones Exteriores a través de su cuenta de Twitter anunciaba que le otorgarían la Orden del Águila Azteca a Jared Kushner, yerno del presidente Donald Trump y asesor de la Casa Blanca. La noticia no nos sorprendió. Es evidente que Peña Nieto ha sido el títere de Trump durante los últimos dos años, y no podía irse sin hacer otra barbaridad: esta vez, otorgarle el máximo galardón que presidencia le otorga a un extranjero por su servicio a México. Debemos recordar que este premio ha sido otorgado a prestigiosas personalidades como Nelson Mandela, Gabriel García Márquez y Bill y Melinda Gates por mencionar algunas. Pero qué ha hecho Jared Kushner para merecer dicho reconocimiento.
En realidad nadie sabe mucho de él, más que fue uno de los principales asesores del presidente Trump durante la negociación del nuevo Tratado de Libre Comercio. ¿Es esto suficiente para condecorarlo? o ¿fue otro capricho de Trump cumplido por Peña?
La verdad no se sabrá, lo que sí sabemos es que a partir de mañana tendremos un nuevo presidente y nos queda esperar que no se convierta en un títere más de Trump y que guíe a México con claridad y respete a sus ciudadanos.
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