El mezcal Señorío se produce con respeto a las técnicas mezcaleras más tradicionales, mediante la cocción de la piña de agave en horno. Además —y como una característica distintiva respecto a otros mezcales— incorpora a su proceso la cocción de la piña al vapor, lo que hace que el perfil emblemático del agave espadín y el ahumado convivan perfectamente en un mezcal joven muy noble, cítrico y suavemente ahumado.
La apariencia cristalina del destilado revela la riqueza de la región de Tlacolula de Matamoros, en Oaxaca, de donde este mezcal es originario. Señorío es, en palabras de Manuel Huerta, embajador de la marca en México, “el verdadero reflejo del color de nuestra tierra, cultura mezcalera y pasión por nuestro origen”.
Señorío, nos cuenta Huerta, es el sueño cumplido del maestro mezcalero oaxaqueño Horacio Flores; en este mezcal joven ha concentrado todos sus conocimientos de la tradición y ha conseguido un mezcal que, sin ser demasiado ahumado, es congruente con su linaje.
Como productores de mezcal, en Señorío se preocupan por proteger su materia prima. Por ello crearon un programa de cultivo de semilla de agave, lo que produce una variedad genética muy interesante con la que pueden trabajar sin poner en peligro a la planta.
Este proceso sostenible, junto con la atención y cuidado en cada detalle, garantizan la calidad de Señorío y lo han convertido, a apenas unos días de su lanzamiento, en uno de nuestros mezcales oaxaqueños favoritos.
Más en nuestra sección de tragos:
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El sueño cumplido del maestro mezcalero oaxaqueño Horacio Flores
El mezcal Señorío se produce con respeto a las técnicas mezcaleras más tradicionales, mediante la cocción de la piña de agave en horno. Además —y como una característica distintiva respecto a otros mezcales— incorpora a su proceso la cocción de la piña al vapor, lo que hace que el perfil emblemático del agave espadín y el ahumado convivan perfectamente en un mezcal joven muy noble, cítrico y suavemente ahumado.
La apariencia cristalina del destilado revela la riqueza de la región de Tlacolula de Matamoros, en Oaxaca, de donde este mezcal es originario. Señorío es, en palabras de Manuel Huerta, embajador de la marca en México, “el verdadero reflejo del color de nuestra tierra, cultura mezcalera y pasión por nuestro origen”.
Señorío, nos cuenta Huerta, es el sueño cumplido del maestro mezcalero oaxaqueño Horacio Flores; en este mezcal joven ha concentrado todos sus conocimientos de la tradición y ha conseguido un mezcal que, sin ser demasiado ahumado, es congruente con su linaje.
Como productores de mezcal, en Señorío se preocupan por proteger su materia prima. Por ello crearon un programa de cultivo de semilla de agave, lo que produce una variedad genética muy interesante con la que pueden trabajar sin poner en peligro a la planta.
Este proceso sostenible, junto con la atención y cuidado en cada detalle, garantizan la calidad de Señorío y lo han convertido, a apenas unos días de su lanzamiento, en uno de nuestros mezcales oaxaqueños favoritos.
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El sueño cumplido del maestro mezcalero oaxaqueño Horacio Flores
El mezcal Señorío se produce con respeto a las técnicas mezcaleras más tradicionales, mediante la cocción de la piña de agave en horno. Además —y como una característica distintiva respecto a otros mezcales— incorpora a su proceso la cocción de la piña al vapor, lo que hace que el perfil emblemático del agave espadín y el ahumado convivan perfectamente en un mezcal joven muy noble, cítrico y suavemente ahumado.
La apariencia cristalina del destilado revela la riqueza de la región de Tlacolula de Matamoros, en Oaxaca, de donde este mezcal es originario. Señorío es, en palabras de Manuel Huerta, embajador de la marca en México, “el verdadero reflejo del color de nuestra tierra, cultura mezcalera y pasión por nuestro origen”.
Señorío, nos cuenta Huerta, es el sueño cumplido del maestro mezcalero oaxaqueño Horacio Flores; en este mezcal joven ha concentrado todos sus conocimientos de la tradición y ha conseguido un mezcal que, sin ser demasiado ahumado, es congruente con su linaje.
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El sueño cumplido del maestro mezcalero oaxaqueño Horacio Flores
El mezcal Señorío se produce con respeto a las técnicas mezcaleras más tradicionales, mediante la cocción de la piña de agave en horno. Además —y como una característica distintiva respecto a otros mezcales— incorpora a su proceso la cocción de la piña al vapor, lo que hace que el perfil emblemático del agave espadín y el ahumado convivan perfectamente en un mezcal joven muy noble, cítrico y suavemente ahumado.
La apariencia cristalina del destilado revela la riqueza de la región de Tlacolula de Matamoros, en Oaxaca, de donde este mezcal es originario. Señorío es, en palabras de Manuel Huerta, embajador de la marca en México, “el verdadero reflejo del color de nuestra tierra, cultura mezcalera y pasión por nuestro origen”.
Señorío, nos cuenta Huerta, es el sueño cumplido del maestro mezcalero oaxaqueño Horacio Flores; en este mezcal joven ha concentrado todos sus conocimientos de la tradición y ha conseguido un mezcal que, sin ser demasiado ahumado, es congruente con su linaje.
Como productores de mezcal, en Señorío se preocupan por proteger su materia prima. Por ello crearon un programa de cultivo de semilla de agave, lo que produce una variedad genética muy interesante con la que pueden trabajar sin poner en peligro a la planta.
Este proceso sostenible, junto con la atención y cuidado en cada detalle, garantizan la calidad de Señorío y lo han convertido, a apenas unos días de su lanzamiento, en uno de nuestros mezcales oaxaqueños favoritos.
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El mezcal Señorío se produce con respeto a las técnicas mezcaleras más tradicionales, mediante la cocción de la piña de agave en horno. Además —y como una característica distintiva respecto a otros mezcales— incorpora a su proceso la cocción de la piña al vapor, lo que hace que el perfil emblemático del agave espadín y el ahumado convivan perfectamente en un mezcal joven muy noble, cítrico y suavemente ahumado.
La apariencia cristalina del destilado revela la riqueza de la región de Tlacolula de Matamoros, en Oaxaca, de donde este mezcal es originario. Señorío es, en palabras de Manuel Huerta, embajador de la marca en México, “el verdadero reflejo del color de nuestra tierra, cultura mezcalera y pasión por nuestro origen”.
Señorío, nos cuenta Huerta, es el sueño cumplido del maestro mezcalero oaxaqueño Horacio Flores; en este mezcal joven ha concentrado todos sus conocimientos de la tradición y ha conseguido un mezcal que, sin ser demasiado ahumado, es congruente con su linaje.
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