Marzo 2020
Ésta es la historia de una elefanta que vivió años de gira, entre luces y aplausos, como una celebridad. Durante la pandemia, y en plena crisis ambiental, viajó en una caja de seguridad a lo largo de dos países, para llegar a Brasil, a un santuario que busca rescatar a los elefantes en cautiverio de la región.
Una novela, editada por Penguin Random House, sobre personas cuyas rupturas internas desembocan en diversos tipos de violencia, y un recorrido por las silenciosas pero visibles consecuencias de la violencia desmedida, y la aflicción que deja a su paso.
México figura entre los siete países donde más cirugías estéticas se realizan. En este contexto, charlatanes prometen tratamientos económicos –sin bisturí y sin anestesia– que provocan terribles daños. Miles han sido víctimas y lidian con el dolor, la culpa y la tragedia de haber puesto su cuerpo en peligro por vanidad. En muchos de estos casos, el daño es irreversible e incluso letal.
Sánchez Mediavilla vivió dos años en Bahréin, una isla en el Golfo Pérsico que ocupa el puesto 167 (de 180 naciones) en la clasificación de libertad de prensa. Durante ese tiempo tomó muchísimas notas de lo que vivió en esos años, como los choques entre suníes y chiíes, que dieron lugar a Una dacha en el Golfo, Premio Anagrama de Crónica 2019.
Su trabajo, disruptivo en su humanismo y sensibilidad, no encontró el reconocimiento que merecía sino hasta después de su muerte, cuando sus posturas y pensamiento se revelaron como brillantes alternativas para combatir la descomposición social.
«Familia de medianoche», documental del director Luke Lorentzen, sigue el día a día de una familia que posee una ambulancia en la Ciudad de México. En él se retrata el mundo subterráneo del cuidado de la salud, que opera fuera del gobierno mexicano.
Parte de colectivos artísticos como grupo CADA (Colectivo Acciones de Arte) o Artists for Democracy, Cecilia Vicuña a través de su práctica artística ha denunciado las atrocidades cometidas contra el pueblo chileno y promovido un activismo radical en temas de raza, género y medio ambiente.
Arturo Ripstein se dedicó al cine porque para él era lo inevitable, siendo hijo de un productor de la Época de oro. Creció entre estudios de filmación y fue aprendiz de muchos realizadores. En 55 años, se hizo de un estilo y un lenguaje propios, con los que mira la realidad soterrada de este país. Su más reciente película, “El diablo entre las piernas”, confirma que es un maestro provocador.
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