La erupción que sepultó a un país
La erupción del Volcán de Fuego, localizado a 40 kilómetros de la capital de Guatemala, ha puesto en estado de emergencia a todo el país centroamericano.
Guatemala está viviendo una de las peores semanas en su historia reciente. La mañana del domingo 3 de junio, el Volcán de Fuego, un estratovolcán localizado al sur del país, entró en erupción y cubrió al país con una columna de ceniza que alcanzó los diez mil metros de altura. Desde entonces, las autoridades correspondientes han contabilizado 101 víctimas mortales y más de 200 desaparecidos.
A pesar de ser conocido como una de las estructuras volcánicas más activas de América Central, el Volcán de Fuego se había mantenido en calma desde el primero de febrero de este año, después de una actividad inusual amenazara la zona en los últimos días de enero. Para el mediodía del pasado domingo, el volcán alcanzó su peor erupción en 44 años. Una fumarola de cenizas perforó la cubierta de nubes y elevó el número de concentraciones de dióxido de azufre, un componente gaseoso tóxico para el ser humano, en la troposfera media.
* * *
También podría interesarte:
Las pandillas de Guatemala le declararon la guerra a los autobuses
Memoria damnificada: No necesitamos otro monumento a la impunidad
* * *
En tierra, miles de personas fueron desalojadas de sus viviendas ante la posibilidad de erupciones aún más agresivas. Durante los episodios ocasionales de actividad explosiva, el volcán emitió grandes columnas de ceniza, flujos de lava y deslizamientos de escombros, que causaron afectaciones en cinco departamentos del país. De acuerdo con cifras oficiales, más de cien personas han resultado muertas como parte de esta tragedia natural, más de doscientas aún se encuentran desaparecidas y 1,7 millones de personas han resultado afectadas.
«Son momentos muy duros para muchos hermanos guatemaltecos, la fuerza impredecible de la naturaleza se ha hecho sentir una vez más y aún es muy pronto para saber a ciencia cierta la totalidad de los daños, es momento de unidad, oración y solidaridad», escribió Jimmy Morales, presidente del país, en su cuenta de Facebook. Ese mismo día, el gobierno de Morales decretó «estado de calamidad pública» en los departamentos de Escuintla, Chimaltenango y Sacetepéquez.
A pesar de que las actividades de rescate y apoyo por parte de las entidades correspondientes y algunos organismos, internacionales como la Cruz Roja o la Organización de las Naciones Unidas (ONU), han sido efectivas, estas se han tenido que suspender momentáneamente debido a nuevas actividades en el volcán. Las operaciones del Aeropuerto Internacional La Aurora, la única entrada aérea a la zona, también fueron suspendidas por las desafortunadas condiciones climatológicas derivadas de la actividad del volcán, imposibilitando el arribo de ayuda internacional.
Ante el estado de emergencia que atraviesa todo el país, el gobierno mexicano, a través de la Secretaria de Relaciones Exteriores puso en marcha el protocolo de atención consular para mexicanos que pudieran resultar afectados por la erupción del volcán. Como una de las medidas de acompañamiento a los connacionales en el lugar, la embajada de México en Guatemala estableció los teléfonos 502 2420 3435 y 502 5555 1266. Además, el presidente Peña Nieto ofreció la asistencia nacional para el pueblo guatemalteco: «Toda nuestra solidaridad y apoyo al presidente Jimmy Morales y al pueblo guatemalteco por la pérdida de vidas humanas tras la erupción del Volcán de Fuego. A través de Protección Civil, hemos ofrecido asistencia para enfrentar esta contingencia», señaló el mandatario en sus redes sociales.
Paralelo a las actividades de rescate y acopio, el gobierno de Guatemala mantiene en constante revisión la actividad del Volcán de Fuego y las estructuras volcánicas de Santiaguito y Pacaya, otros dos volcanes activos en el país.
Fotografía de portada: Conred Guatemala
Recomendaciones Gatopardo
Más historias que podrían interesarte.