Para pasar dos horas o todo el día, la Cineteca Nacional funciona. Un cambio agradable a los cines de cadenas comerciales, siempre inmersos en el último piso de un centro comercial atestado, con tres películas en sus 19 salas. Los aficionados al cine hemos perfeccionado la técnica de llegar justo al inicio de la película para evitar los 15 insufribles minutos de comerciales y salir en cuanto el primer crédito aparece. Nadie quiere estar ni un minuto más de lo necesario. La Cineteca Nacional es la agradable excepción; todos sus espacios invitan a llegar antes e irse después. Está la librería (que justo ahora tiene descuentos), un helado en Roxy si vas temprano, una cena en La Chicha si sales tarde; un concierto en su nueva terraza para agregar un par de horas más, cerrar con broche de oro, pedir vino o una cerveza, escuchar un poco de jazz.
En realidad la nueva terraza de la Cineteca ya existía. Desde que se inauguró el espacio de la galería estaba ahí, en la planta alta a la que se llega por las escaleras frente al cubo. El año pasado albergó la Fiesta de la Música, y de vez en cuando las inauguraciones o clausuras de las exposiciones se hacían ahí. Hace un par de meses decidieron remodelarla, la techaron y rodearon con las cortinas transparentes de cualquier terraza para bloquear el aire, le pusieron piso de madera, un bonito escenario, sillas, mesas y una barra. Sin complicarse la vida en la barra hay cervezas artesanales, nacionales, vino, palomitas y tabla de carnes frías; nada más. Y qué mejor.
De jueves a domingo puedes escuchar música, entre las 5 y las 11 pm. Al escenario llega el rock, el jazz y el folk; de vez en cuando algún dj se apodera de las tornamesas. El acceso es gratuito y como todavía no tienen una cartelera en línea de los eventos, mucho del encanto es llegar a ver qué encuentras, aunque si te gusta planear con un poco de anticipación puedes estar pendiente de sus redes sociales, en las que siempre anuncian los eventos. Hace algunos días el grupo de jazz Mr. Paisa abrió la pista (puedes ver un video de la presentación aquí), y también estuvo el grupo de folk Apache O’Raspi.
Texto publicado originalmente en Local.mx
¡Gracias!
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Un nuevo espacio para pasar la tarde donde el protagonista no es el cine, sino la música y las buenas bebidas.
Para pasar dos horas o todo el día, la Cineteca Nacional funciona. Un cambio agradable a los cines de cadenas comerciales, siempre inmersos en el último piso de un centro comercial atestado, con tres películas en sus 19 salas. Los aficionados al cine hemos perfeccionado la técnica de llegar justo al inicio de la película para evitar los 15 insufribles minutos de comerciales y salir en cuanto el primer crédito aparece. Nadie quiere estar ni un minuto más de lo necesario. La Cineteca Nacional es la agradable excepción; todos sus espacios invitan a llegar antes e irse después. Está la librería (que justo ahora tiene descuentos), un helado en Roxy si vas temprano, una cena en La Chicha si sales tarde; un concierto en su nueva terraza para agregar un par de horas más, cerrar con broche de oro, pedir vino o una cerveza, escuchar un poco de jazz.
En realidad la nueva terraza de la Cineteca ya existía. Desde que se inauguró el espacio de la galería estaba ahí, en la planta alta a la que se llega por las escaleras frente al cubo. El año pasado albergó la Fiesta de la Música, y de vez en cuando las inauguraciones o clausuras de las exposiciones se hacían ahí. Hace un par de meses decidieron remodelarla, la techaron y rodearon con las cortinas transparentes de cualquier terraza para bloquear el aire, le pusieron piso de madera, un bonito escenario, sillas, mesas y una barra. Sin complicarse la vida en la barra hay cervezas artesanales, nacionales, vino, palomitas y tabla de carnes frías; nada más. Y qué mejor.
De jueves a domingo puedes escuchar música, entre las 5 y las 11 pm. Al escenario llega el rock, el jazz y el folk; de vez en cuando algún dj se apodera de las tornamesas. El acceso es gratuito y como todavía no tienen una cartelera en línea de los eventos, mucho del encanto es llegar a ver qué encuentras, aunque si te gusta planear con un poco de anticipación puedes estar pendiente de sus redes sociales, en las que siempre anuncian los eventos. Hace algunos días el grupo de jazz Mr. Paisa abrió la pista (puedes ver un video de la presentación aquí), y también estuvo el grupo de folk Apache O’Raspi.
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Un nuevo espacio para pasar la tarde donde el protagonista no es el cine, sino la música y las buenas bebidas.
Para pasar dos horas o todo el día, la Cineteca Nacional funciona. Un cambio agradable a los cines de cadenas comerciales, siempre inmersos en el último piso de un centro comercial atestado, con tres películas en sus 19 salas. Los aficionados al cine hemos perfeccionado la técnica de llegar justo al inicio de la película para evitar los 15 insufribles minutos de comerciales y salir en cuanto el primer crédito aparece. Nadie quiere estar ni un minuto más de lo necesario. La Cineteca Nacional es la agradable excepción; todos sus espacios invitan a llegar antes e irse después. Está la librería (que justo ahora tiene descuentos), un helado en Roxy si vas temprano, una cena en La Chicha si sales tarde; un concierto en su nueva terraza para agregar un par de horas más, cerrar con broche de oro, pedir vino o una cerveza, escuchar un poco de jazz.
En realidad la nueva terraza de la Cineteca ya existía. Desde que se inauguró el espacio de la galería estaba ahí, en la planta alta a la que se llega por las escaleras frente al cubo. El año pasado albergó la Fiesta de la Música, y de vez en cuando las inauguraciones o clausuras de las exposiciones se hacían ahí. Hace un par de meses decidieron remodelarla, la techaron y rodearon con las cortinas transparentes de cualquier terraza para bloquear el aire, le pusieron piso de madera, un bonito escenario, sillas, mesas y una barra. Sin complicarse la vida en la barra hay cervezas artesanales, nacionales, vino, palomitas y tabla de carnes frías; nada más. Y qué mejor.
De jueves a domingo puedes escuchar música, entre las 5 y las 11 pm. Al escenario llega el rock, el jazz y el folk; de vez en cuando algún dj se apodera de las tornamesas. El acceso es gratuito y como todavía no tienen una cartelera en línea de los eventos, mucho del encanto es llegar a ver qué encuentras, aunque si te gusta planear con un poco de anticipación puedes estar pendiente de sus redes sociales, en las que siempre anuncian los eventos. Hace algunos días el grupo de jazz Mr. Paisa abrió la pista (puedes ver un video de la presentación aquí), y también estuvo el grupo de folk Apache O’Raspi.
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Un nuevo espacio para pasar la tarde donde el protagonista no es el cine, sino la música y las buenas bebidas.
Para pasar dos horas o todo el día, la Cineteca Nacional funciona. Un cambio agradable a los cines de cadenas comerciales, siempre inmersos en el último piso de un centro comercial atestado, con tres películas en sus 19 salas. Los aficionados al cine hemos perfeccionado la técnica de llegar justo al inicio de la película para evitar los 15 insufribles minutos de comerciales y salir en cuanto el primer crédito aparece. Nadie quiere estar ni un minuto más de lo necesario. La Cineteca Nacional es la agradable excepción; todos sus espacios invitan a llegar antes e irse después. Está la librería (que justo ahora tiene descuentos), un helado en Roxy si vas temprano, una cena en La Chicha si sales tarde; un concierto en su nueva terraza para agregar un par de horas más, cerrar con broche de oro, pedir vino o una cerveza, escuchar un poco de jazz.
En realidad la nueva terraza de la Cineteca ya existía. Desde que se inauguró el espacio de la galería estaba ahí, en la planta alta a la que se llega por las escaleras frente al cubo. El año pasado albergó la Fiesta de la Música, y de vez en cuando las inauguraciones o clausuras de las exposiciones se hacían ahí. Hace un par de meses decidieron remodelarla, la techaron y rodearon con las cortinas transparentes de cualquier terraza para bloquear el aire, le pusieron piso de madera, un bonito escenario, sillas, mesas y una barra. Sin complicarse la vida en la barra hay cervezas artesanales, nacionales, vino, palomitas y tabla de carnes frías; nada más. Y qué mejor.
De jueves a domingo puedes escuchar música, entre las 5 y las 11 pm. Al escenario llega el rock, el jazz y el folk; de vez en cuando algún dj se apodera de las tornamesas. El acceso es gratuito y como todavía no tienen una cartelera en línea de los eventos, mucho del encanto es llegar a ver qué encuentras, aunque si te gusta planear con un poco de anticipación puedes estar pendiente de sus redes sociales, en las que siempre anuncian los eventos. Hace algunos días el grupo de jazz Mr. Paisa abrió la pista (puedes ver un video de la presentación aquí), y también estuvo el grupo de folk Apache O’Raspi.
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En realidad la nueva terraza de la Cineteca ya existía. Desde que se inauguró el espacio de la galería estaba ahí, en la planta alta a la que se llega por las escaleras frente al cubo. El año pasado albergó la Fiesta de la Música, y de vez en cuando las inauguraciones o clausuras de las exposiciones se hacían ahí. Hace un par de meses decidieron remodelarla, la techaron y rodearon con las cortinas transparentes de cualquier terraza para bloquear el aire, le pusieron piso de madera, un bonito escenario, sillas, mesas y una barra. Sin complicarse la vida en la barra hay cervezas artesanales, nacionales, vino, palomitas y tabla de carnes frías; nada más. Y qué mejor.
De jueves a domingo puedes escuchar música, entre las 5 y las 11 pm. Al escenario llega el rock, el jazz y el folk; de vez en cuando algún dj se apodera de las tornamesas. El acceso es gratuito y como todavía no tienen una cartelera en línea de los eventos, mucho del encanto es llegar a ver qué encuentras, aunque si te gusta planear con un poco de anticipación puedes estar pendiente de sus redes sociales, en las que siempre anuncian los eventos. Hace algunos días el grupo de jazz Mr. Paisa abrió la pista (puedes ver un video de la presentación aquí), y también estuvo el grupo de folk Apache O’Raspi.
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En realidad la nueva terraza de la Cineteca ya existía. Desde que se inauguró el espacio de la galería estaba ahí, en la planta alta a la que se llega por las escaleras frente al cubo. El año pasado albergó la Fiesta de la Música, y de vez en cuando las inauguraciones o clausuras de las exposiciones se hacían ahí. Hace un par de meses decidieron remodelarla, la techaron y rodearon con las cortinas transparentes de cualquier terraza para bloquear el aire, le pusieron piso de madera, un bonito escenario, sillas, mesas y una barra. Sin complicarse la vida en la barra hay cervezas artesanales, nacionales, vino, palomitas y tabla de carnes frías; nada más. Y qué mejor.
De jueves a domingo puedes escuchar música, entre las 5 y las 11 pm. Al escenario llega el rock, el jazz y el folk; de vez en cuando algún dj se apodera de las tornamesas. El acceso es gratuito y como todavía no tienen una cartelera en línea de los eventos, mucho del encanto es llegar a ver qué encuentras, aunque si te gusta planear con un poco de anticipación puedes estar pendiente de sus redes sociales, en las que siempre anuncian los eventos. Hace algunos días el grupo de jazz Mr. Paisa abrió la pista (puedes ver un video de la presentación aquí), y también estuvo el grupo de folk Apache O’Raspi.
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