El anuncio de las nominaciones al Oscar dio el banderazo para la conversación cinematográfica más grande del año. Hitos, claras omisiones, necesarios reconocimientos y nuevos talentos serán parte de la plática que año con año desencadenan estos premios, siempre cuestionables pero indudablemente entretenidos. En estas nominaciones, lo predecible (y “decepcionante” para algunos medios y comentaristas) primó, aunque también hubo gratas sorpresas. En primera instancia, vale la pena revisar quiénes tuvieron buen año. Joker, la escandalosa película de Todd Phillips ganó el León de Oro en Venecia y desató controversia por su tratamiento de temas de política, pobreza y salud mental. La cinta recibió más nominaciones que ninguna otra y competirá por once estatuillas, que incluyen los premios a Mejor Película, Director, Actor (Joaquin Phoenix), Guión Adaptado, Edición, Cinematografía entre varias otras. Detrás de Joker viene The Irishman, la sensación de Martin Scorsese, con 10 nominaciones, pero ninguna para actores principales. Es decir, Robert De Niro no está nominado, a diferencia de otros intérpretes en la cinta, como Al Pacino o Joe Pesci. El cinefotógrafo mexicano Rodrigo Prieto también está nominado por su trabajo en la cinta, mientras que la editora Thelma Schoomaker recibe su octava nominación y espera ganar con esta película su cuarto Oscar. También con 10 nominaciones están Once Upon a Time… in Hollywood, el sueño nostálgico de Quentin Tarantino, y 1917, épica de Sam Mendes, perfilada hacia categorías técnicas como la fotografía de Roger Deakins, entre otros rubros.[caption id="attachment_242322" align="alignnone" width="620"]
The Irishman de Martin Scorsese.[/caption]Detrás de éstas el conteo se hace homogéneo. Películas como JoJo Rabbit, Little Women (Mujercitas en México), Marriage Story y Parasite cuentan con 6 nominaciones cada una. Entre ellas, el caso de Parasite (como el de Roma el año pasado) es notable: no sólo es la primera película surcoreana en estar nominada a Mejor Película (y Mejor Película en Lengua Extranjera), sino también en tener tantas nominaciones. Esta atención particular de la Academia demuestra su interés por el cine que se hace fuera de Estados Unidos, y habla de la necesidad de romper fronteras para estos premios y adquirir una perspectiva más global.Otras notables nominaciones incluyen Perdí mi Cuerpo, el excelente debut animado de Jérémy Clapin (con distribución de Netflix), así como el reconocimiento a Jarin Blaschke, por su trabajo en la cinematografía de The Lighthouse (El Faro en México). Resulta grato ver a Florence Pugh, actriz de Little Women, finalmente nominada por su trabajo, después de ser ignorada en 2017 con su película Lady Macbeth. Con sólo 24 años, Pugh se perfila para ser un próximo emblema de la actuación alrededor del mundo. Otra buena noticia fue la nominación de Antonio Banderas por su reciente trabajo con Pedro Almodóvar en Dolor y Gloria.Sin embargo y a pesar de los debidos reconocimientos, las nominaciones en general fueron para hombres y gente blanca. En la categoría de Mejor Actor y Actriz (incluso en la categoría de reparto), sólo se encuentra una persona de color: Cynthia Erivo, por su inquebrantable papel como Harriet Tubman en la cinta Harriet. Por otro lado, la categoría de Mejor Director sólo incluye hombres. La disparidad viene desde la producción. Anualmente se producen muchas más películas por hombres que mujeres, pero en 2019 se estrenaron extraordinarias cintas dirigidas por mujeres. The Farewell, por ejemplo, realizada por la chino-americana Lulu Wang, y estelarizada por un elenco asiático (que también habla chino durante casi todo el metraje) no recibió ni una nominación, a pesar de su amplio reconocimiento crítico. Little Women fue nominada a varios premios, pero no a Mejor Dirección para Greta Gerwig. Otros ejemplos incluyen Retrato de una Mujer en Llamas, dirigida por Céline Sciamma, y Marielle Heller con su película A Beautiful Day in the Neighborhood, cuyo trabajo no llegó a una nominación.[caption id="attachment_243307" align="alignnone" width="620"]
Honey Boy, debut narrativo de Alma Har'el.[/caption]Otra cineasta ignorada es Alma Har’el, que este año realizó la audaz Honey Boy, escrita por el actor Shia Laboeuf. Es un intenso y catártico largometraje sobre un chico y la problemática relación con su padre. A pesar del reconocimiento y premios que ha recibido esta película, tanto los Globos de Oro como los Oscares la pasaron de largo. Al enterarse de ello Har’el publicó lo siguiente en su cuetna de Twitter: “Buenos días a todos los que me escriben sobre los #GoldenGlobes. Los entiendo, pero sepan lo siguiente. Este año estuve por primera dentro del sistema. Ellos no son parte de nosotros y por lo tanto no nos representan. No busquen justicia en el sistema de premios. Estamos construyendo un nuevo mundo”.
Good morning to everyone that’s writing me about the #goldenglobesI feel you but know this.I was on the inside for the first time this year. These are not our people and they do not represent us.Do not look for justice in the awards system.
We are building a new world. https://t.co/IK7YNy5J5S— Alma Har'el🌪 (@Almaharel) December 9, 2019
Tras las nominaciones de los Oscares, Har’el volvió a twitear: “¡Sigamos haciendo cosas frescas! Cuando no nos incluyen, no nos ignoran, simplemente se reafirman más irrelevantes”. Actrices y actores como Lupita Nyong’o, por su papel en el thriller de horror Us, Awkwafina en The Farewell, Jennifer Lopez en Hustlers o Eddie Murphy en Dolemite is my Name, tampoco fueron nominados. Lo cierto es que no cualquier cinta alcanza un reconocimiento tan específico como los Oscares, especialmente cuando hay cientos de limitantes alrededor. En un texto de Letterboxd, Sean Baker (director y escritor de Tangerine y The Florida Project) lo externó de esta forma: “Al final del día, el éxito en la temporada de premios es sobre relaciones públicas… y cuánto dinero le invierte uno a esas relaciones públicas”. Las nominaciones no hablan tanto de calidad, sino de inversiones y reconocimientos específicos, para públicos específicos, y de la determinación de la Academia para crear nuevas estrellas del mundo del entretenimiento. Tanto como reconocer trabajos, el objetivo de los Oscares es perfilar nuevos talentos. [caption id="attachment_243057" align="alignnone" width="620"]
Parasite, del director Bong Joon Ho.[/caption]Pero su espacio como plataforma tampoco debe ser ignorado. El reconocimiento que reciben películas como Roma o Parasite hablan de una academia con mayor espacio para la inclusión. En este caso destacan las nominaciones de Parasite a Mejor Edición y Diseño de Producción, además de Mejor Película, Director o Guión. Por su parte, el documental macedonio Honeyland hace su marca al estar nominada a Mejor Película Extranjera y también a Mejor Documental, algo que jamás había sucedido a una cinta de su país. Los premios Oscar no tienen espacio para todas las buenas películas, y por todas las justas inclusiones, también existen omisiones injustas (como Greta Gerwig cuya película Little Women fue nominada a varios premios menos Mejor Director). Desde hace un tiempo, en estos premios por cada dos pasos adelante, también se da uno para atrás.
*Fotografía de portada: Academy of Motion Picutre Arts and Sciences / De https www.oscars.org