Cuando el legado es sólido, la innovación no debe dejar lugar a dudas. La transformación de JLR México pone el ejemplo y demuestra que siempre se puede apuntar hacia el futuro. Range Rover, Defender y Jaguar entran en la recta final en su camino hacia la sostenibilidad, sustentabilidad y la responsabilidad por construir un futuro más verde. Impulsadas por la conectividad, diseño funcional, innovación y alta tecnología que caracterizan a estas tres líneas JLR México, el objetivo es que para 2030 todas tengan su versión eléctrica.

“JLR está comprometido con liderar una transición en la que se pueda ver una mezcla de estos ingredientes muy importantes: rendimiento, integrando la tecnología más avanzada y, por supuesto, un diseño de lujo”, compartió en conferencia de prensa Montserrat Martínez, directora de marca y producto de JLR para México, Latinoamérica y Caribe.

Con la participación de entusiastas de Range Rover, Defender y Jaguar, la primera edición del DriveFest de JLR México en el Autódromo Hermanos Rodríguez demostró que la filosofía de lujo moderno, que envuelve a las tres marcas, es el camino hacia el futuro pero siempre con el legado en la mente. Si bien cada línea brilla con su respectivo ADN, entre ellas comparten valores como la relación entre los usuarios, los vehículos y el medio ambiente.

“Nos centramos en la elegancia, la modernidad y una esencia de esta visión muy particular hacia el futuro”, dijo Martínez como preámbulo a las pruebas de manejo del festival.

En las pistas del DriveFest se pudieron ver y comprobar las cualidades de Range Rover, Defender y Jaguar. En la prueba de smart cones, en la que los vehículos debían recorrer un circuito marcado por conos luminosos, Range Rover destacó por su lujo, estabilidad, manejo y potencia.

“Es la marca con la que estamos poniendo un pie, al cien por ciento, en esa electrificación”, explicó la directiva.

Los modelos Defender 90 y Defender 110 debían pasar sobre estructuras metálicas que asemejan las condiciones naturales a las que, como vehículo todoterreno, puede enfrentarse: asfalto, arena, lodo, nieve. “Defender ha tenido, en los últimos años, un éxito brutal a partir de su rediseño”.

En pista, los automóviles Jaguar F-Pace y Jaguar F-Type demostraron la potencia y velocidad que ya son parte de su legado y que se mantendrán en su transformación a autos eléctricos pero desde una perspectiva sustentable y sostenible.

“Jaguar será muy respetuoso con el pasado, con sus 75 años, pero no está sujeto a él. Jaguar tiene un nuevo lenguaje de diseño distintivo y construido sobre una plataforma interna con la que vamos ofrecer una marca espectacular”, dijo Montserrat Martínez.

Además de honrar el legado y las capacidades de las líneas Range Rover, Defender y Jaguar, durante el DriveFest de JLR también se anunció la primera edición de Defender House, experiencia en la que los vehículos se pondrán a prueba en un ambiente de contraste entre espacios naturales y arquitectura urbana.

La experiencia —similar a la Range Rover House, que ha tenido sedes en Vail, Aspen, Dubai, Australia y su primera edición en México el pasado diciembre— busca mezclar la capacidad de un todoterreno con el lujo de forma única.

“Lo que queremos hoy, y nuestro deseo, es ser esos narradores de historias y creadores de memorias. Hemos descubierto, a lo largo de este año, cómo dar vida a nuestros productos y, al mismo tiempo, lograr una conexión emocional mucho más profunda con nuestros clientes”, adelantó Montserrat Martínez.

Si se enaltece la memoria y la transformación se da para seguir contando historias, Range Rover, Defender y Jaguar, no hay duda, respetan el legado mientras avanzan hacia el futuro.