Escenarios postapocalípticos han poblado el cine en la última década, todos con un grado más o menos considerable de acción, desde Children of Men (2006) hasta Mad Max: Fury Road (2015). Las tinieblas, el segundo largometraje del cineasta mexicano Daniel Castro Zimbrón, parte de una circunstancia similar pero abordada desde un punto de vista rural y remoto para hacer un ensayo sobre la pérdida de la humanidad. Esta cinta llega a cines comerciales el 13 de octubre, luego de haber sido presentada en el Festival Mórbido y en el Festival Internacional de Cine de Morelia.

Las tinieblas presenta a una familia liderada por el padre —interpretado por el chileno Brontis Jodorowsky—. Complementan el elenco Aliocha Sotnikoff y Camila Robertson. Mientras residen en una cabaña aislada en el bosque, rodeada por una neblina tóxica y al acecho de una misteriosa bestia, el mayor de los tres hermanos desaparece, lo que tensa los vínculos filiales. No hay mayores pistas de qué orilló a la familia a vivir en tales condiciones, una vida regida por la supervivencia.

Aliocha Sotnikoff es uno de los actores que participan en «Las tinieblas».

Castro Zimbrón sintió la necesidad de crear una historia tras leer The Road, de Cormac McCarthy. “Quería hacer algo con esa misma energía y sensación”, dice el director en entrevista para Gatopardo. “Yo había trabajado unos ejercicios en el Centro de Capacitación Cinematográfica que eran sobre el encierro”; esto resultó en un cortometraje llamado Bestiario, en el que una familia encierra al padre en el sótano de la casa. “Quería retomarlo de algún modo, se quedó cortado ese camino y sentí que quería hacer algo con eso, entonces empecé a escribir esta historia.”

El director debutó en 2012 con la cinta Táu, también protagonizada por Jodorowsky. “Brontis se ha vuelto como una extensión de mí, como que desde que hicimos Táu nos empezamos a entender mucho”, dice. Para él, este actor representa a la vez una figura paterna y una figura de amistad. “Ya lo veo como una parte de mí en mi trabajo. Brontis ha sido un elemento muy importante.”

Diego García (ganador del Premio Fénix en 2016 por Boi Neon), fotografió la cinta de Daniel Castro Zimbrón.

Alisarine Ducolomb, quien ha hecho el diseño de producción en sus dos largometrajes, fue quien le recomendó a Jodorowsky al realizador. “Yo no lo había visto nada desde El topo (1970), cuando era un niño y salió en la película de su papá. Cuando vi una foto de él pensé: ‘¡Qué rostro tiene este señor!’.” Ahora el actor es uno de los pilares de la trilogía construida por Castro Zimbrón, que contiene Táu, Las tinieblas y un proyecto aún sin título en el que los ambientes hostiles retratan el interior de la mente de sus personajes. “La conexión no es como tal de historias, si no que hay elementos en común. Son juegos y pistas para al final reconstruir algo que aún no diré qué es”, comenta.

Lo cierto es que Las tinieblas se mantiene por sí sola. Está reforzada por la fotografía de Diego García (ganador del Premio Fénix en 2016 por Boi Neon), que retrata de forma inquietante el misterio que envuelve a la cabaña donde habitan los personajes. La cinta fue filmada en El Chico, en el estado de Hidalgo, y la cabaña fue diseñada y construida a partir de las necesidades del equipo creativo.

Las tinieblas es uno de los ejemplos principales del gran momento que atraviesa el cine de género en México. “Está surgiendo un bloque de cineastas que estamos en una búsqueda distinta para el cine mexicano.”