La directora y guionista argentina Lucrecia Martel visitará la Ciudad de México en la última semana de febrero para participar como invitada especial en la octava edición del Festival Internacional de Cine de la Universidad Nacional Autónoma de México (FICUNAM).

Martel, nacida en la provincia de Salta al norte de Argentina en 1966, es considerada una de las cineastas latinoamericanas más relevantes del siglo XXI y una voz importante en el llamado “Nuevo Cine Argentino”. Con apenas cuatro títulos en su filmografía, dos de ellas presentadas en la Selección Oficinal del Festival de Cannes, Martel se ha destacado por su propuesta visual, apoyada desde su concepción por el sonido.

Durante sus actividades, programadas para el 28 de febrero y 1 de marzo, la cineasta ofrecerá la clase magistral “El cine de Lucrecia Martel” en el auditorio del Museo Universitario de Arte Contemporáneo (MUAC) y participará en la mesa “El sonido y las letras” del Foro de la Crítica Permanente, junto a Kent Jones, director artístico de World Cinema Foundation y el crítico Roger Koza.

Aprovechando la visita de la directora, recomendamos cinco películas para conocer mejor el cine de Lucrecia Martel.

La Ciénaga
Después de dirigir un par de cortometrajes durante los últimos años de la década de los ochenta y trabajar ocasionalmente en la televisión, Martel sorprendió a la prensa de su país con su ópera prima, La Ciénaga, un drama inspirado en su familia. Protagonizada por Mercedes Morán y Graciela Borges, el filme seguía la historia de dos familias de distintas sociedades cuya historia de engaños y traiciones explotará durante una temporada de calor en La Ciénaga, Salta. Después de su estreno en el Festival de Cine de Berlín de 2001, donde el filme fue galardonado con el Premio Alfred Bauer, la primera cinta de Martel se proyectó en los festivales de cine de Toronto, Nueva York, Varsovia, Róterdam, Uruguay y La Habana.

La niña santa
Situándose de nueva cuenta en su ciudad natal, Martel llegó a un público nuevo con su segundo largometraje, La niña santa, protagonizada por Mercedes Morán, Carlos Belloso, Alejandro Urdapilleta y María Alche. En el filme, presentado dentro de la selección oficial del Festival de Cine de Cannes en 2004, la también guionista cuenta la historia de Amalia, una niña del coro que toma una única misión en su vida: librar del pecado al Dr. Jano, un prestigioso médico que llegó a dar una charla al hotel donde vive la niña y que seguramente está seduciendo a su madre. La película ganó una mención honorífica por parte de la crítica del Festival de Cine de Sao Paulo.

La mujer sin cabeza
Contando con el apoyo de los hermanos Almodóvar, dos de las figuras más importantes en la producción de cine iberoamericano, Martel regresaría al Festival de Cannes con su tercera película, La mujer sin cabeza, en la que maquiavélicamente ponía a su protagonista, una mujer llamada Verónica (interpretada por María Onetto) en una crisis de preocupación tras creer que había atropellado y matado a alguien. Después de un par de días, donde la calma había regresado poco a poco pues no se había reportado ningún accidente en la zona, un horrible descubrimiento hace que la mujer vuelva a perder la cabeza, al menos en el sentido metafórico de la expresión. El filme, también protagonizado por Claudia Cantero, César Bordón y Daniel Genoud ganó el premio FIPRESCI de la crítica internacional en el Festival de Cine de Río de Janeiro en 2008.

Zama
Basada en la novela homónima escrita por Antonio Di Benedetto, Zama, sigue la historia de un oficial español (interpretado brillantemente por Daniel Giménez Cacho) asentado en los poco explorados territorios americanos del siglo XVII y su lucha por ser reconocido y transferido a Buenos Aires. Después de atrasar su estreno por motivos personales, Martel regresó al centro de atención con su épica, producida por casas de España, Francia, Estados Unidos, México, Portugal, Holanda, Suiza y Argentina; la cinta, estrenada en el Festival de Cine de Venecia compitió por el Goya a Mejor Película Iberoamericana y buscó la candidatura al Oscar a Mejor Película Extranjera.

Años luz
Aprovechando el rodaje de Zama, el director argentino Manuel Abramovich siguió con su cámara a la directora en su viaje a través de la selva, la playa, los estudios de grabación y las horas y horas de edición. El documental estrenado a la par de la presentación de Zama en Venecia forma parte de la sección El Porvenir de la octava edición del FICUNAM.

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