Bill Cunningham salía todos los días en su bicicleta para retratar la moda callejera de Nueva York. Su cámara era democrática, fotografió a celebridades y a transeúntes comunes, sin distinciones de raza, complexión física o clase social: la belleza negra, los homosexuales, los ancianos, las musulmanas con el cabello cubierto. Cunningham colocó a todos ellos en las páginas del New York Times, desde los años setenta hasta su muerte en junio de 2016, a los 87 años. La mayoría de sus fotografías no han sido publicadas. Los miles de negativos que dejó en su diminuto departamento son un invaluable registro de los tantos fenómenos que han tomado las calles de Nueva York en las últimas décadas.
Recordamos al legendario fotógrafo Bill Cunningham hizo de las calles de Nueva York su principal fuente de inspiración.
Bill Cunningham salía todos los días en su bicicleta para retratar la moda callejera de Nueva York. Su cámara era democrática, fotografió a celebridades y a transeúntes comunes, sin distinciones de raza, complexión física o clase social: la belleza negra, los homosexuales, los ancianos, las musulmanas con el cabello cubierto. Cunningham colocó a todos ellos en las páginas del New York Times, desde los años setenta hasta su muerte en junio de 2016, a los 87 años. La mayoría de sus fotografías no han sido publicadas. Los miles de negativos que dejó en su diminuto departamento son un invaluable registro de los tantos fenómenos que han tomado las calles de Nueva York en las últimas décadas.
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