El pasado agosto, Pedro Friedeberg recibió a un grupo de periodistas en su casa-taller. Durante una agradable comida en la biblioteca, presentó una colaboración con Tequila 1800, una botella que incorpora una de sus obras a su diseño, la joya de la familia: Tequila 1800 Milenio.
Friedeberg es un prestigioso artista mexicano de origen italiano, reconocido por su trabajo surrealista. Es el autor de la ahora icónica Hand Chair, que ha sido premiada en la Bienal de Córdoba, Argentina, la Exhibición Solar en la Ciudad de México, la XI Bienal de Artes Gráficas, entre otras. Más de una veintena de sus creaciones han sido expuestas en recintos como el Museo de Arte Moderno de Nueva York, el Museo de Arte Contemporáneo en Chicago, el Museo de Arte Contemporáneo en Nueva Orleans, el Museo de Louvre en París y el Museo de Israel en Jerusalén, por citar apenas algunos.
El artista decidió hacer esta colaboración pues es un gran fanático del tequila. “Aquí lo importante es el contenido de la botella”, dijo mientras presentaba la edición limitada. Tequila 1800 Milenio es elaborado artesanalmente y madurado de 36 a 40 meses en barricas de roble americano, con un terminado de cuatro meses más en barricas de roble francés usadas en la maduración del coñac.
El buen humor del artista fue evidente durante la visita a su estudio. Sus respuestas siempre son crípticas y llenas de humor negro. “La diferencia entre la persona y el artista es la misma que hay entre un aguacate y un gato, o entre el Monumento a la Revolución y un violín Stradivarius. Mi arte está hecho en parte del imaginario barroco caprichoso y de fantasías flamígeras del repertorio dadaísta y surrealista, con raíces en la admiración por lo absurdo y lo ridículo. Lo extravagante y lo estrafalario, lo ilógico y lo disparado”, dijo cuando alguien le preguntó sobre el significado de su obra.
La colaboración de Friedeberg con Tequila 1800 Milenio será una edición limitada de la que sólo se venderán 550 botellas. La pieza, según su autor, es “una fantasía escultórica-arquitectónica proyectada en 1966. Hay referencias de obeliscos egipcios-dinamarqueses y de grecas neo-clásico-helénico-oaxaqueñas-art-déco”.
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