Estos son los momentos estelares de la lucha feminista contra la violencia de género en América Latina, la cual ha tenido que recorrer un largo y arduo camino hasta llegar al día de hoy.
A finales de los setenta, el feminismo transformó las concepciones vigentes en México y América Latina sobre la violencia sexual contra las mujeres. Se pasó de verla como una expresión incontrolable de la sexualidad masculina a entenderla como un fenómeno social y un acto de poder inaceptable, cuyo sentido es controlar y disciplinar a las mujeres. Se combatió y se modificó la visión tradicional de que las víctimas son las que provocan o desean los actos de violencia sexual. Se acuñaron conceptos nuevos como “violencia doméstica”, “feminicidio”, “hostigamiento” y “acoso sexual” y se incorporaron a las legislaciones como delitos punibles. Los cambios jurídicos, sin embargo, no han contenido la violencia contra las mujeres, que persiste en sus múltiples y dolorosas expresiones. Los hitos de esta línea del tiempo son una muestra de las acciones políticas y culturales del movimiento y de los instrumentos legales de mayor trascendencia en el combate a la violencia de género. Momentos clave de un relato que está por escribirse, pero que permiten comprender la historia y el presente de los feminismos latinoamericanos.