Uno de los retos más grandes de los lectores es saber qué libro escogerán después. Depende del humor, de si se quiere seguir con la misma temática, o quizá cambiar de formato. Es complejo y delicado. Bookmate, una nueva app de lectura, pensó toda su estructura a partir de esa frágil decisión ante la que todo lector se confronta al final de un libro. "Lo más importante, el corazón de Bookmate, es que la gente descubra qué leer después", dijo en entrevista para Gatopardo Andrew Baev, el director ejecutivo de la aplicación. "Lo que queremos es hacer que la gente siga leyendo".
Andrew Baev, director ejecutivo de Bookmate Esta app de lectura nació en Rusia, cuando el grupo de empresarios amantes de la lectura –Simon Dunlop, Victor Frumkin y Andrew Baev– cayeron en cuenta que la mayoría de la gente que leía, bajaba sus libros ilegalmente. "Nadie pagaba por nada del contenido, todo era a través de torrents, y nuestra idea fue intentar entender cómo hacerle para que la gente deje de robar libros; cómo hacerle para interesarlos". La solución directa que encontraron fue que, aunque la gente bajaba los libros, al acabarlos se topaban con pared, sin saber cuál sería el siguiente paso. Los creadores de Bookmate se dieron cuenta que la mejor receta para interesar a la gente era ponerles en bandeja de plata su siguiente lectura. "Toda la plataforma se fue creando entorno a historias y a cómo se consumen", dice Baev. En esta aplicación hay e-books, audiolibros y podcasts, pero continuamente buscan otras maneras en que la gente querría consumir libros (dejando la parte audiovisual fuera, por lo menos por el momento).
Al tener un millón 200 mil libros, en más de 12 idiomas, las recomendaciones pueden ponerse un poco complejas. Para asegurarse de que realmente sean buenas y sean útiles a los usuarios, en cada país hay un equipo de ávidos lectores, conectados con las editoriales más importantes, que saben cuáles son las tendencias de lectura. Sumado a esto, la plataforma tiene un algoritmo que, basado en lo que el usuario ya leyó, hará recomendaciones similares. Además, en esta aplicación los usuarios pueden recomendar y comentar los libros que han leído. Es una especie de club de lectura transformado en red social donde los lectores pueden hacer sus propias "estanterías" y agrupar libros por géneros o temas para compartirlos o simplemente organizarlos. Con esta herramienta, un profesor, por ejemplo, puede hacer pública su bibliografía sugerida, a la cual pueden acceder tanto sus alumnos, como otras personas que estén interesadas en el tema.
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Pero... en Latinoamérica no se lee
"En todos los países a los que hemos llegado –tienen oficinas en Inglaterra, Dinamarca, Suecia, Rusia, Serbia, Turquía, Indonesia, Singapur y México, pero la aplicación se puede usar en cualquier parte del mundo– lo primero que nos dicen es: es que aquí no leemos. Pero siempre nos damos cuenta de lo contrario y el problema es que la gente no tiene una manera conveniente de leer", dice Baev para explicar por qué la aplicación está pensada para utilizarse en teléfonos inteligentes. "La gente lee: está en las redes sociales y lee, o en los medios como revistas y periódicos. Sí leen, la cosa es cómo leen. La aplicación está diseñada principalmente para teléfonos inteligentes y para facilitar la lectura los usuarios pueden elegir entre varios tipos de letra, de tamaños, y de colores (sepia, blanco o negro) para no forzar los ojos. Cada página se adapta al tamaño de la pantalla y así, el teléfono móvil se convierte en un real libro de bolsillo.
Según los creadores de esta app de lectura, en México entre el 55 y 60 por ciento de la gente que lee, lo hace desde un medio digital, situándose en uno de los niveles más altos a nivel mundial. Hay miles de personas que jamás han entrado a una biblioteca, pero tienen teléfonos celulares y eso los convierte en lectores potenciales. "Lo que queremos es explicarles que puedes leer cosas interesantes y que es fácil tener acceso a ellas", explica Baev. La aplicación, que funciona muy parecido a Netflix y otras plataformas de streaming, tiene un costo mensual de 79.00 pesos mexicanos, o $790 si se paga todo el año por adelantado. A cambio, se tiene acceso a más de 500 mil libros y audiolibros. Sin embargo, también está la opción de acceder sin suscripción, lo que te permite leer libros de dominio público que ya fueron formateados para la plataforma.