Es verdad, el mundo de las barras evoluciona sin detenerse y no perdona ni un segundo. Desde el tema de la sustentabilidad en los ingredientes para preparar cocteles imperdibles, hasta en la batalla por la equidad detrás de las barras, que le ha dado más espacios a grandes mujeres bartenders que dejan su impronta en cada coctel.
Así lo confirma la intrépida Fátima León, de 27 años, ganadora del World Class México 2017, que la posicionó entre los mejores mixólogos del mundo. Detrás de la barra de bares como Fifty Mills, ella aprendió a hacer de su profesión algo camaleónico para preparar tragos que fueran versátiles y la pusieran en movimiento. Desde entonces ha descubierto un sentido de responsabilidad como bartender, al estar en la mira de los reflectores, para construir una filosofía que inspire a otras mujeres.
Durante una tarde con Gatopardo, Fátima viene a preparar un coctel veraniego con Tequila Don Julio 70 Añejo Cristalino en El Mirador, en la San Miguel Chapultepec; una tradicional cantina de la Ciudad de México que existe desde principios del siglo pasado junto al Bosque de Chapultepec, y que cuenta con un peculiar salón apodado por la concurrencia como el “club de Toby”, adonde hasta hace unos años, por increíble que parezca, no era usual el acceso a las mujeres. Pero hoy Fátima León ha llegado a tomar el poder de su barra.
“El camino ha sido un poco más largo para nosotras. No nos ha favorecido el género. Yo por ejemplo empecé estudiando gastronomía y mis estudios tuvieron que respaldarme. Pero creo que el país ha tenido un avance enorme en igualdad y equidad. Este es un trabajo duro y desgastante y nosotras hemos tenido que movernos, seguir siendo nosotras, para que valoren nuestro trabajo”, dice en entrevista.
Mientras busca un par de vasos highball, en este espacio que ahora celebramos la entrada a mujeres, Fátima se confiesa una amante del tequila. Es uno de sus destilados favoritos para mezclar. “¡El tequila es rejuvenecedor!”, dice entre risas. “Me gusta que tenga una gama de características muy amplia para mezclar, y que además es un destilado que suele unir a la gente y que es símbolo de celebración”, dice.
Para esta ocasión, pensó en un coctel que resaltara los cítricos de las notas de Tequila Don Julio 70 Añejo Cristalino. Se trata del primer cristalino que llegó a la industria del agave: un añejo reposado que pasó por un proceso final de destilado. Para éste, Fátima pensó en ingredientes que fueran fáciles de conseguir como las toronjas y el licor de damiana, hecho a base de una planta originaria de México que los mayas utilizaron para la fertilidad. Está también el hidrosol, de lavanda y manzanilla, que trae una destilación de botánicos sin alcohol que maximiza los sabores como lo haría un perfume, y que puede ser reemplazada por una infusión casera.
“Busqué como enaltecer lo mexicano”, asegura.
Luego de ir incorporando los ingredientes con un jigger y mucho hielo en un shaker, Fátima crea un trago que sabe a toronjas y a verano. Lo adorna con flores comestibles.
El verano ha llegado y sabe a Tequila Don Julio 70.
Receta del coctel:
60 ml Tequila Don julio 70
40 ml jugo de toronja
15 ml licor de damiana
15 ml jugo de limón amarillo
20ml jarabe natural
30 ml hidrosol floral
Garnitura (adorno):
Toronja en gajo y flor comestible
Vaso highball
*Locación: El Mirador de Chapultepec