De las treinta entidades que celebrarán elecciones locales el próximo primero de julio, la Ciudad de México es quizá el punto de mayor interés, gracias a su reciente cambio de figura legal y política. Según el nuevo Código de Instituciones y Procedimientos Electorales y la Ley Procesal Electoral de la Ciudad de México, la entidad será reconfigurada a partir de esta elección. Aunque el dirigente del estado seguirá siendo el Jefe de Gobierno -cargo por el que compiten principalmente Claudia Sheinbaum de MORENA, PT y PES, Alejandra Barrales de PAN, PRD y MC y Mikel Arriola del PRI, PVEM y PANAL- el resto de la organización cambiará considerablemente.
Las 16 delegaciones políticas serán sustituidas por alcaldías, cuyo dirigente, el alcalde, ostentará el cargo por tres años con posibilidad de reelegirse para un periodo adicional. El jefe de gobierno y los alcaldes también integrarán el primer Cabildo de la Ciudad de México, una junta que sesionará bimestralmente para acordar políticas públicas. Dentro de la estructura de las alcaldías también se establece la institución de las concejalías, figuras pluripartidistas que estarán a cargo de la administración pública de la ciudad.
Cada demarcación territorial tendrá entre 10 y 15 concejales, según su número de habitantes, que serán electos por planillas en la próxima elección. Sin embargo, aunque los votos los favorezcan, ningún partido político podrá tener más del 60% de participación en las concejalías. Así, 96 concejales serán electos directamente por el voto y el restante (64 concejales) será asignado por representación proporcional con base en la cantidad de votos que hayan recibido las planillas vencidas.
* * *
También podría interesarte:
Elecciones 2018: La histórica, pero insuficiente, representación indígena
Recortan 68% el presupuesto para la observación electoral
México sí tiene un superávit comercial en alimentos
* * *
Otro de los cambios a destacar es la conformación del Congreso de la Ciudad de México, cámara baja conformada por diputados locales electos por distrito, que sustituye a la actual Asamblea de Representantes. El congreso estará formado por 33 diputados locales favorecidos con el voto popular y 33 diputados partidistas seleccionados por la vía plurinominal.
Este primero de julio cambiará la estructura de gobierno de la Ciudad de México. Estos son los cambios.
De las treinta entidades que celebrarán elecciones locales el próximo primero de julio, la Ciudad de México es quizá el punto de mayor interés, gracias a su reciente cambio de figura legal y política. Según el nuevo Código de Instituciones y Procedimientos Electorales y la Ley Procesal Electoral de la Ciudad de México, la entidad será reconfigurada a partir de esta elección. Aunque el dirigente del estado seguirá siendo el Jefe de Gobierno -cargo por el que compiten principalmente Claudia Sheinbaum de MORENA, PT y PES, Alejandra Barrales de PAN, PRD y MC y Mikel Arriola del PRI, PVEM y PANAL- el resto de la organización cambiará considerablemente.
Las 16 delegaciones políticas serán sustituidas por alcaldías, cuyo dirigente, el alcalde, ostentará el cargo por tres años con posibilidad de reelegirse para un periodo adicional. El jefe de gobierno y los alcaldes también integrarán el primer Cabildo de la Ciudad de México, una junta que sesionará bimestralmente para acordar políticas públicas. Dentro de la estructura de las alcaldías también se establece la institución de las concejalías, figuras pluripartidistas que estarán a cargo de la administración pública de la ciudad.
Cada demarcación territorial tendrá entre 10 y 15 concejales, según su número de habitantes, que serán electos por planillas en la próxima elección. Sin embargo, aunque los votos los favorezcan, ningún partido político podrá tener más del 60% de participación en las concejalías. Así, 96 concejales serán electos directamente por el voto y el restante (64 concejales) será asignado por representación proporcional con base en la cantidad de votos que hayan recibido las planillas vencidas.
* * *
También podría interesarte:
Elecciones 2018: La histórica, pero insuficiente, representación indígena
Recortan 68% el presupuesto para la observación electoral
México sí tiene un superávit comercial en alimentos
* * *
Otro de los cambios a destacar es la conformación del Congreso de la Ciudad de México, cámara baja conformada por diputados locales electos por distrito, que sustituye a la actual Asamblea de Representantes. El congreso estará formado por 33 diputados locales favorecidos con el voto popular y 33 diputados partidistas seleccionados por la vía plurinominal.
Este primero de julio cambiará la estructura de gobierno de la Ciudad de México. Estos son los cambios.
De las treinta entidades que celebrarán elecciones locales el próximo primero de julio, la Ciudad de México es quizá el punto de mayor interés, gracias a su reciente cambio de figura legal y política. Según el nuevo Código de Instituciones y Procedimientos Electorales y la Ley Procesal Electoral de la Ciudad de México, la entidad será reconfigurada a partir de esta elección. Aunque el dirigente del estado seguirá siendo el Jefe de Gobierno -cargo por el que compiten principalmente Claudia Sheinbaum de MORENA, PT y PES, Alejandra Barrales de PAN, PRD y MC y Mikel Arriola del PRI, PVEM y PANAL- el resto de la organización cambiará considerablemente.
Las 16 delegaciones políticas serán sustituidas por alcaldías, cuyo dirigente, el alcalde, ostentará el cargo por tres años con posibilidad de reelegirse para un periodo adicional. El jefe de gobierno y los alcaldes también integrarán el primer Cabildo de la Ciudad de México, una junta que sesionará bimestralmente para acordar políticas públicas. Dentro de la estructura de las alcaldías también se establece la institución de las concejalías, figuras pluripartidistas que estarán a cargo de la administración pública de la ciudad.
Cada demarcación territorial tendrá entre 10 y 15 concejales, según su número de habitantes, que serán electos por planillas en la próxima elección. Sin embargo, aunque los votos los favorezcan, ningún partido político podrá tener más del 60% de participación en las concejalías. Así, 96 concejales serán electos directamente por el voto y el restante (64 concejales) será asignado por representación proporcional con base en la cantidad de votos que hayan recibido las planillas vencidas.
* * *
También podría interesarte:
Elecciones 2018: La histórica, pero insuficiente, representación indígena
Recortan 68% el presupuesto para la observación electoral
México sí tiene un superávit comercial en alimentos
* * *
Otro de los cambios a destacar es la conformación del Congreso de la Ciudad de México, cámara baja conformada por diputados locales electos por distrito, que sustituye a la actual Asamblea de Representantes. El congreso estará formado por 33 diputados locales favorecidos con el voto popular y 33 diputados partidistas seleccionados por la vía plurinominal.
Este primero de julio cambiará la estructura de gobierno de la Ciudad de México. Estos son los cambios.
De las treinta entidades que celebrarán elecciones locales el próximo primero de julio, la Ciudad de México es quizá el punto de mayor interés, gracias a su reciente cambio de figura legal y política. Según el nuevo Código de Instituciones y Procedimientos Electorales y la Ley Procesal Electoral de la Ciudad de México, la entidad será reconfigurada a partir de esta elección. Aunque el dirigente del estado seguirá siendo el Jefe de Gobierno -cargo por el que compiten principalmente Claudia Sheinbaum de MORENA, PT y PES, Alejandra Barrales de PAN, PRD y MC y Mikel Arriola del PRI, PVEM y PANAL- el resto de la organización cambiará considerablemente.
Las 16 delegaciones políticas serán sustituidas por alcaldías, cuyo dirigente, el alcalde, ostentará el cargo por tres años con posibilidad de reelegirse para un periodo adicional. El jefe de gobierno y los alcaldes también integrarán el primer Cabildo de la Ciudad de México, una junta que sesionará bimestralmente para acordar políticas públicas. Dentro de la estructura de las alcaldías también se establece la institución de las concejalías, figuras pluripartidistas que estarán a cargo de la administración pública de la ciudad.
Cada demarcación territorial tendrá entre 10 y 15 concejales, según su número de habitantes, que serán electos por planillas en la próxima elección. Sin embargo, aunque los votos los favorezcan, ningún partido político podrá tener más del 60% de participación en las concejalías. Así, 96 concejales serán electos directamente por el voto y el restante (64 concejales) será asignado por representación proporcional con base en la cantidad de votos que hayan recibido las planillas vencidas.
* * *
También podría interesarte:
Elecciones 2018: La histórica, pero insuficiente, representación indígena
Recortan 68% el presupuesto para la observación electoral
México sí tiene un superávit comercial en alimentos
* * *
Otro de los cambios a destacar es la conformación del Congreso de la Ciudad de México, cámara baja conformada por diputados locales electos por distrito, que sustituye a la actual Asamblea de Representantes. El congreso estará formado por 33 diputados locales favorecidos con el voto popular y 33 diputados partidistas seleccionados por la vía plurinominal.
Este primero de julio cambiará la estructura de gobierno de la Ciudad de México. Estos son los cambios.
De las treinta entidades que celebrarán elecciones locales el próximo primero de julio, la Ciudad de México es quizá el punto de mayor interés, gracias a su reciente cambio de figura legal y política. Según el nuevo Código de Instituciones y Procedimientos Electorales y la Ley Procesal Electoral de la Ciudad de México, la entidad será reconfigurada a partir de esta elección. Aunque el dirigente del estado seguirá siendo el Jefe de Gobierno -cargo por el que compiten principalmente Claudia Sheinbaum de MORENA, PT y PES, Alejandra Barrales de PAN, PRD y MC y Mikel Arriola del PRI, PVEM y PANAL- el resto de la organización cambiará considerablemente.
Las 16 delegaciones políticas serán sustituidas por alcaldías, cuyo dirigente, el alcalde, ostentará el cargo por tres años con posibilidad de reelegirse para un periodo adicional. El jefe de gobierno y los alcaldes también integrarán el primer Cabildo de la Ciudad de México, una junta que sesionará bimestralmente para acordar políticas públicas. Dentro de la estructura de las alcaldías también se establece la institución de las concejalías, figuras pluripartidistas que estarán a cargo de la administración pública de la ciudad.
Cada demarcación territorial tendrá entre 10 y 15 concejales, según su número de habitantes, que serán electos por planillas en la próxima elección. Sin embargo, aunque los votos los favorezcan, ningún partido político podrá tener más del 60% de participación en las concejalías. Así, 96 concejales serán electos directamente por el voto y el restante (64 concejales) será asignado por representación proporcional con base en la cantidad de votos que hayan recibido las planillas vencidas.
* * *
También podría interesarte:
Elecciones 2018: La histórica, pero insuficiente, representación indígena
Recortan 68% el presupuesto para la observación electoral
México sí tiene un superávit comercial en alimentos
* * *
Otro de los cambios a destacar es la conformación del Congreso de la Ciudad de México, cámara baja conformada por diputados locales electos por distrito, que sustituye a la actual Asamblea de Representantes. El congreso estará formado por 33 diputados locales favorecidos con el voto popular y 33 diputados partidistas seleccionados por la vía plurinominal.
De las treinta entidades que celebrarán elecciones locales el próximo primero de julio, la Ciudad de México es quizá el punto de mayor interés, gracias a su reciente cambio de figura legal y política. Según el nuevo Código de Instituciones y Procedimientos Electorales y la Ley Procesal Electoral de la Ciudad de México, la entidad será reconfigurada a partir de esta elección. Aunque el dirigente del estado seguirá siendo el Jefe de Gobierno -cargo por el que compiten principalmente Claudia Sheinbaum de MORENA, PT y PES, Alejandra Barrales de PAN, PRD y MC y Mikel Arriola del PRI, PVEM y PANAL- el resto de la organización cambiará considerablemente.
Las 16 delegaciones políticas serán sustituidas por alcaldías, cuyo dirigente, el alcalde, ostentará el cargo por tres años con posibilidad de reelegirse para un periodo adicional. El jefe de gobierno y los alcaldes también integrarán el primer Cabildo de la Ciudad de México, una junta que sesionará bimestralmente para acordar políticas públicas. Dentro de la estructura de las alcaldías también se establece la institución de las concejalías, figuras pluripartidistas que estarán a cargo de la administración pública de la ciudad.
Cada demarcación territorial tendrá entre 10 y 15 concejales, según su número de habitantes, que serán electos por planillas en la próxima elección. Sin embargo, aunque los votos los favorezcan, ningún partido político podrá tener más del 60% de participación en las concejalías. Así, 96 concejales serán electos directamente por el voto y el restante (64 concejales) será asignado por representación proporcional con base en la cantidad de votos que hayan recibido las planillas vencidas.
* * *
También podría interesarte:
Elecciones 2018: La histórica, pero insuficiente, representación indígena
Recortan 68% el presupuesto para la observación electoral
México sí tiene un superávit comercial en alimentos
* * *
Otro de los cambios a destacar es la conformación del Congreso de la Ciudad de México, cámara baja conformada por diputados locales electos por distrito, que sustituye a la actual Asamblea de Representantes. El congreso estará formado por 33 diputados locales favorecidos con el voto popular y 33 diputados partidistas seleccionados por la vía plurinominal.