Santiago tenía tan sólo un año cuando fue asesinado. El pequeño fue una de las víctimas de la masacre en Minatitlán, Veracruz el pasado 19 de abril. Junto a su familia, se encontraba en una celebración de cumpleaños cuando un grupo de hombres ingresaron al lugar y abrieron fuego en contra de los asistentes. La imagen de Santiago tendido en el suelo, con su playerita amarilla manchada de sangre, no tardó en circular en redes sociales y junto a ella una pequeña muestra de la cruel realidad a la que se enfrentan los niños en México debido a la crisis de violencia por la que atraviesa el país.
Tan sólo en el primer trimestre del 2019, se registraron 285 homicidios dolosos en los que la víctima tenía de cero a 17 años. Es decir, 3.2 homicidios diarios, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), un panorama bastante grave respecto al que la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) exhortó al gobierno federal a tomar acciones y poner especial atención a mejorar la calidad de vida de los niños, niñas y jóvenes mexicanos.
De acuerdo con el informe de la Red sobre incidencia delictiva y violencia contra niñas, niños y adolescentes en México 2015-2019, se registraron cuatro mil 299 víctimas de homicidio doloso contra dicho sector de la sociedad, cantidad que representa cerca del 4% del total de víctimas de este delito. Por otro lado, los estados más violentos fueron Guanajuato, donde se registró el mayor número de asesinatos contra menores varones, nueve de cada 10 casos; Veracruz y Nuevo León. La REDIM detalló que en lo que va del 2019 se han registrado, al menos, 29 feminicidios de niñas y adolescentes.
Juan Martín Pérez García, director ejecutivo de la REDIM, urgió a que el estado establezca una estrategia de prevención y atención a la violencia contra niños, niñas y adolescentes, con apoyo de expertos internacionales y sociedad civil; sustentada en la ley, con responsables institucionales, y presupuesto, pues, destacó que de cada 100 carpetas de investigación donde las víctimas son niñas, niños o adolescentes, solo hay una sentencia condenatoria.
Es verdad que el devastador panorama al que se enfrenta la niñez en México no es nada nuevo, es una constante que ha venido incrementando desde hace más de una década y en eso tiene mucho que ver la guerra contra el narcotráfico. Desde 2006 a 2019, el crimen organizado ha cobrado la vida de más de 16 mil niñas, niños y adolescentes. La red reportó que de 2015 a marzo del 2019 suman 4,299 homicidios dolosos, en su mayoría con arma de fuego. Realidad que se vuelve aún más oscura si a esas cifras se añaden los 7 mil casos de desaparecidos.
Los niños, niñas y adolescentes son conscientes del complicado panorama al que se enfrentan en México. Prueba de ello son los resultados de la Consulta Infantil y Juvenil (CIJ) realizada por el Instituto Nacional Electoral (INE) a finales de 2018 con la participación de 5 millones 671 mil 384 menores de 6 a 17 años.
Esta consulta fue realizada por primera vez en 1997 por el entonces Instituto Federal Electoral y desde entonces cuenta con el apoyo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF); el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna).
Los resultados revelan que la violencia física, verbal y sexual hacia menores en México se ha agravado. Según los datos, los menores más violentados física o verbalmente están entre 6 y 9 años, pues 50.7% de los niños y 46.4 % de las niñas dijeron haber recibido golpes. La consulta expone también la percepción a otros tipos de violencia y cierra con una sección en la que los menores podían dar propuestas para tener “un mejor México”.
Entre las propuestas de los niños entre 6 y 9 años destacan: mayor cuidado a las niñas y los niños, mejores escuelas, mayor seguridad y que el gobierno no robe. El grupo de menores de entre 10 y 13 años pidió: erradicar la violencia, seguridad para la infancia y más igualdad. Mientras que el grupo de los 14 a los 17 años, coincidió en erradicar la violencia y sumó la opción de tener calles más seguras.
El Gobierno debe actuar
El gobierno actual tiene apenas cuatro meses al frente de México. Sin embargo, el impacto por la crisis de violencia habla por sí sola, y es urgente implementar medidas para proteger a este, uno de los grupos más vulnerables de la población: los niños, niñas y jóvenes. Para ello, entre otras cosas, se debe fortalecer el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), además de inversión pública para la niñez y adolescencia.
El 30 de abril de 2018, Andrés Manuel López Obrador, entonces candidato presidencial, firmó un compromiso #MXporLaNiñez, en el que señaló como prioridad atender el tema de seguridad de los niños. Es necesario que el gobierno actual retome el compromiso para garantizar los derechos de la niñez.
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En el país, tres menores mueren diariamente víctimas de homicidio.
Santiago tenía tan sólo un año cuando fue asesinado. El pequeño fue una de las víctimas de la masacre en Minatitlán, Veracruz el pasado 19 de abril. Junto a su familia, se encontraba en una celebración de cumpleaños cuando un grupo de hombres ingresaron al lugar y abrieron fuego en contra de los asistentes. La imagen de Santiago tendido en el suelo, con su playerita amarilla manchada de sangre, no tardó en circular en redes sociales y junto a ella una pequeña muestra de la cruel realidad a la que se enfrentan los niños en México debido a la crisis de violencia por la que atraviesa el país.
Tan sólo en el primer trimestre del 2019, se registraron 285 homicidios dolosos en los que la víctima tenía de cero a 17 años. Es decir, 3.2 homicidios diarios, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), un panorama bastante grave respecto al que la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) exhortó al gobierno federal a tomar acciones y poner especial atención a mejorar la calidad de vida de los niños, niñas y jóvenes mexicanos.
De acuerdo con el informe de la Red sobre incidencia delictiva y violencia contra niñas, niños y adolescentes en México 2015-2019, se registraron cuatro mil 299 víctimas de homicidio doloso contra dicho sector de la sociedad, cantidad que representa cerca del 4% del total de víctimas de este delito. Por otro lado, los estados más violentos fueron Guanajuato, donde se registró el mayor número de asesinatos contra menores varones, nueve de cada 10 casos; Veracruz y Nuevo León. La REDIM detalló que en lo que va del 2019 se han registrado, al menos, 29 feminicidios de niñas y adolescentes.
Juan Martín Pérez García, director ejecutivo de la REDIM, urgió a que el estado establezca una estrategia de prevención y atención a la violencia contra niños, niñas y adolescentes, con apoyo de expertos internacionales y sociedad civil; sustentada en la ley, con responsables institucionales, y presupuesto, pues, destacó que de cada 100 carpetas de investigación donde las víctimas son niñas, niños o adolescentes, solo hay una sentencia condenatoria.
Es verdad que el devastador panorama al que se enfrenta la niñez en México no es nada nuevo, es una constante que ha venido incrementando desde hace más de una década y en eso tiene mucho que ver la guerra contra el narcotráfico. Desde 2006 a 2019, el crimen organizado ha cobrado la vida de más de 16 mil niñas, niños y adolescentes. La red reportó que de 2015 a marzo del 2019 suman 4,299 homicidios dolosos, en su mayoría con arma de fuego. Realidad que se vuelve aún más oscura si a esas cifras se añaden los 7 mil casos de desaparecidos.
Los niños, niñas y adolescentes son conscientes del complicado panorama al que se enfrentan en México. Prueba de ello son los resultados de la Consulta Infantil y Juvenil (CIJ) realizada por el Instituto Nacional Electoral (INE) a finales de 2018 con la participación de 5 millones 671 mil 384 menores de 6 a 17 años.
Esta consulta fue realizada por primera vez en 1997 por el entonces Instituto Federal Electoral y desde entonces cuenta con el apoyo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF); el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna).
Los resultados revelan que la violencia física, verbal y sexual hacia menores en México se ha agravado. Según los datos, los menores más violentados física o verbalmente están entre 6 y 9 años, pues 50.7% de los niños y 46.4 % de las niñas dijeron haber recibido golpes. La consulta expone también la percepción a otros tipos de violencia y cierra con una sección en la que los menores podían dar propuestas para tener “un mejor México”.
Entre las propuestas de los niños entre 6 y 9 años destacan: mayor cuidado a las niñas y los niños, mejores escuelas, mayor seguridad y que el gobierno no robe. El grupo de menores de entre 10 y 13 años pidió: erradicar la violencia, seguridad para la infancia y más igualdad. Mientras que el grupo de los 14 a los 17 años, coincidió en erradicar la violencia y sumó la opción de tener calles más seguras.
El Gobierno debe actuar
El gobierno actual tiene apenas cuatro meses al frente de México. Sin embargo, el impacto por la crisis de violencia habla por sí sola, y es urgente implementar medidas para proteger a este, uno de los grupos más vulnerables de la población: los niños, niñas y jóvenes. Para ello, entre otras cosas, se debe fortalecer el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), además de inversión pública para la niñez y adolescencia.
El 30 de abril de 2018, Andrés Manuel López Obrador, entonces candidato presidencial, firmó un compromiso #MXporLaNiñez, en el que señaló como prioridad atender el tema de seguridad de los niños. Es necesario que el gobierno actual retome el compromiso para garantizar los derechos de la niñez.
En el país, tres menores mueren diariamente víctimas de homicidio.
Santiago tenía tan sólo un año cuando fue asesinado. El pequeño fue una de las víctimas de la masacre en Minatitlán, Veracruz el pasado 19 de abril. Junto a su familia, se encontraba en una celebración de cumpleaños cuando un grupo de hombres ingresaron al lugar y abrieron fuego en contra de los asistentes. La imagen de Santiago tendido en el suelo, con su playerita amarilla manchada de sangre, no tardó en circular en redes sociales y junto a ella una pequeña muestra de la cruel realidad a la que se enfrentan los niños en México debido a la crisis de violencia por la que atraviesa el país.
Tan sólo en el primer trimestre del 2019, se registraron 285 homicidios dolosos en los que la víctima tenía de cero a 17 años. Es decir, 3.2 homicidios diarios, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), un panorama bastante grave respecto al que la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) exhortó al gobierno federal a tomar acciones y poner especial atención a mejorar la calidad de vida de los niños, niñas y jóvenes mexicanos.
De acuerdo con el informe de la Red sobre incidencia delictiva y violencia contra niñas, niños y adolescentes en México 2015-2019, se registraron cuatro mil 299 víctimas de homicidio doloso contra dicho sector de la sociedad, cantidad que representa cerca del 4% del total de víctimas de este delito. Por otro lado, los estados más violentos fueron Guanajuato, donde se registró el mayor número de asesinatos contra menores varones, nueve de cada 10 casos; Veracruz y Nuevo León. La REDIM detalló que en lo que va del 2019 se han registrado, al menos, 29 feminicidios de niñas y adolescentes.
Juan Martín Pérez García, director ejecutivo de la REDIM, urgió a que el estado establezca una estrategia de prevención y atención a la violencia contra niños, niñas y adolescentes, con apoyo de expertos internacionales y sociedad civil; sustentada en la ley, con responsables institucionales, y presupuesto, pues, destacó que de cada 100 carpetas de investigación donde las víctimas son niñas, niños o adolescentes, solo hay una sentencia condenatoria.
Es verdad que el devastador panorama al que se enfrenta la niñez en México no es nada nuevo, es una constante que ha venido incrementando desde hace más de una década y en eso tiene mucho que ver la guerra contra el narcotráfico. Desde 2006 a 2019, el crimen organizado ha cobrado la vida de más de 16 mil niñas, niños y adolescentes. La red reportó que de 2015 a marzo del 2019 suman 4,299 homicidios dolosos, en su mayoría con arma de fuego. Realidad que se vuelve aún más oscura si a esas cifras se añaden los 7 mil casos de desaparecidos.
Los niños, niñas y adolescentes son conscientes del complicado panorama al que se enfrentan en México. Prueba de ello son los resultados de la Consulta Infantil y Juvenil (CIJ) realizada por el Instituto Nacional Electoral (INE) a finales de 2018 con la participación de 5 millones 671 mil 384 menores de 6 a 17 años.
Esta consulta fue realizada por primera vez en 1997 por el entonces Instituto Federal Electoral y desde entonces cuenta con el apoyo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF); el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna).
Los resultados revelan que la violencia física, verbal y sexual hacia menores en México se ha agravado. Según los datos, los menores más violentados física o verbalmente están entre 6 y 9 años, pues 50.7% de los niños y 46.4 % de las niñas dijeron haber recibido golpes. La consulta expone también la percepción a otros tipos de violencia y cierra con una sección en la que los menores podían dar propuestas para tener “un mejor México”.
Entre las propuestas de los niños entre 6 y 9 años destacan: mayor cuidado a las niñas y los niños, mejores escuelas, mayor seguridad y que el gobierno no robe. El grupo de menores de entre 10 y 13 años pidió: erradicar la violencia, seguridad para la infancia y más igualdad. Mientras que el grupo de los 14 a los 17 años, coincidió en erradicar la violencia y sumó la opción de tener calles más seguras.
El Gobierno debe actuar
El gobierno actual tiene apenas cuatro meses al frente de México. Sin embargo, el impacto por la crisis de violencia habla por sí sola, y es urgente implementar medidas para proteger a este, uno de los grupos más vulnerables de la población: los niños, niñas y jóvenes. Para ello, entre otras cosas, se debe fortalecer el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), además de inversión pública para la niñez y adolescencia.
El 30 de abril de 2018, Andrés Manuel López Obrador, entonces candidato presidencial, firmó un compromiso #MXporLaNiñez, en el que señaló como prioridad atender el tema de seguridad de los niños. Es necesario que el gobierno actual retome el compromiso para garantizar los derechos de la niñez.
En el país, tres menores mueren diariamente víctimas de homicidio.
Santiago tenía tan sólo un año cuando fue asesinado. El pequeño fue una de las víctimas de la masacre en Minatitlán, Veracruz el pasado 19 de abril. Junto a su familia, se encontraba en una celebración de cumpleaños cuando un grupo de hombres ingresaron al lugar y abrieron fuego en contra de los asistentes. La imagen de Santiago tendido en el suelo, con su playerita amarilla manchada de sangre, no tardó en circular en redes sociales y junto a ella una pequeña muestra de la cruel realidad a la que se enfrentan los niños en México debido a la crisis de violencia por la que atraviesa el país.
Tan sólo en el primer trimestre del 2019, se registraron 285 homicidios dolosos en los que la víctima tenía de cero a 17 años. Es decir, 3.2 homicidios diarios, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), un panorama bastante grave respecto al que la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) exhortó al gobierno federal a tomar acciones y poner especial atención a mejorar la calidad de vida de los niños, niñas y jóvenes mexicanos.
De acuerdo con el informe de la Red sobre incidencia delictiva y violencia contra niñas, niños y adolescentes en México 2015-2019, se registraron cuatro mil 299 víctimas de homicidio doloso contra dicho sector de la sociedad, cantidad que representa cerca del 4% del total de víctimas de este delito. Por otro lado, los estados más violentos fueron Guanajuato, donde se registró el mayor número de asesinatos contra menores varones, nueve de cada 10 casos; Veracruz y Nuevo León. La REDIM detalló que en lo que va del 2019 se han registrado, al menos, 29 feminicidios de niñas y adolescentes.
Juan Martín Pérez García, director ejecutivo de la REDIM, urgió a que el estado establezca una estrategia de prevención y atención a la violencia contra niños, niñas y adolescentes, con apoyo de expertos internacionales y sociedad civil; sustentada en la ley, con responsables institucionales, y presupuesto, pues, destacó que de cada 100 carpetas de investigación donde las víctimas son niñas, niños o adolescentes, solo hay una sentencia condenatoria.
Es verdad que el devastador panorama al que se enfrenta la niñez en México no es nada nuevo, es una constante que ha venido incrementando desde hace más de una década y en eso tiene mucho que ver la guerra contra el narcotráfico. Desde 2006 a 2019, el crimen organizado ha cobrado la vida de más de 16 mil niñas, niños y adolescentes. La red reportó que de 2015 a marzo del 2019 suman 4,299 homicidios dolosos, en su mayoría con arma de fuego. Realidad que se vuelve aún más oscura si a esas cifras se añaden los 7 mil casos de desaparecidos.
Los niños, niñas y adolescentes son conscientes del complicado panorama al que se enfrentan en México. Prueba de ello son los resultados de la Consulta Infantil y Juvenil (CIJ) realizada por el Instituto Nacional Electoral (INE) a finales de 2018 con la participación de 5 millones 671 mil 384 menores de 6 a 17 años.
Esta consulta fue realizada por primera vez en 1997 por el entonces Instituto Federal Electoral y desde entonces cuenta con el apoyo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF); el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna).
Los resultados revelan que la violencia física, verbal y sexual hacia menores en México se ha agravado. Según los datos, los menores más violentados física o verbalmente están entre 6 y 9 años, pues 50.7% de los niños y 46.4 % de las niñas dijeron haber recibido golpes. La consulta expone también la percepción a otros tipos de violencia y cierra con una sección en la que los menores podían dar propuestas para tener “un mejor México”.
Entre las propuestas de los niños entre 6 y 9 años destacan: mayor cuidado a las niñas y los niños, mejores escuelas, mayor seguridad y que el gobierno no robe. El grupo de menores de entre 10 y 13 años pidió: erradicar la violencia, seguridad para la infancia y más igualdad. Mientras que el grupo de los 14 a los 17 años, coincidió en erradicar la violencia y sumó la opción de tener calles más seguras.
El Gobierno debe actuar
El gobierno actual tiene apenas cuatro meses al frente de México. Sin embargo, el impacto por la crisis de violencia habla por sí sola, y es urgente implementar medidas para proteger a este, uno de los grupos más vulnerables de la población: los niños, niñas y jóvenes. Para ello, entre otras cosas, se debe fortalecer el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), además de inversión pública para la niñez y adolescencia.
El 30 de abril de 2018, Andrés Manuel López Obrador, entonces candidato presidencial, firmó un compromiso #MXporLaNiñez, en el que señaló como prioridad atender el tema de seguridad de los niños. Es necesario que el gobierno actual retome el compromiso para garantizar los derechos de la niñez.
En el país, tres menores mueren diariamente víctimas de homicidio.
Santiago tenía tan sólo un año cuando fue asesinado. El pequeño fue una de las víctimas de la masacre en Minatitlán, Veracruz el pasado 19 de abril. Junto a su familia, se encontraba en una celebración de cumpleaños cuando un grupo de hombres ingresaron al lugar y abrieron fuego en contra de los asistentes. La imagen de Santiago tendido en el suelo, con su playerita amarilla manchada de sangre, no tardó en circular en redes sociales y junto a ella una pequeña muestra de la cruel realidad a la que se enfrentan los niños en México debido a la crisis de violencia por la que atraviesa el país.
Tan sólo en el primer trimestre del 2019, se registraron 285 homicidios dolosos en los que la víctima tenía de cero a 17 años. Es decir, 3.2 homicidios diarios, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), un panorama bastante grave respecto al que la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) exhortó al gobierno federal a tomar acciones y poner especial atención a mejorar la calidad de vida de los niños, niñas y jóvenes mexicanos.
De acuerdo con el informe de la Red sobre incidencia delictiva y violencia contra niñas, niños y adolescentes en México 2015-2019, se registraron cuatro mil 299 víctimas de homicidio doloso contra dicho sector de la sociedad, cantidad que representa cerca del 4% del total de víctimas de este delito. Por otro lado, los estados más violentos fueron Guanajuato, donde se registró el mayor número de asesinatos contra menores varones, nueve de cada 10 casos; Veracruz y Nuevo León. La REDIM detalló que en lo que va del 2019 se han registrado, al menos, 29 feminicidios de niñas y adolescentes.
Juan Martín Pérez García, director ejecutivo de la REDIM, urgió a que el estado establezca una estrategia de prevención y atención a la violencia contra niños, niñas y adolescentes, con apoyo de expertos internacionales y sociedad civil; sustentada en la ley, con responsables institucionales, y presupuesto, pues, destacó que de cada 100 carpetas de investigación donde las víctimas son niñas, niños o adolescentes, solo hay una sentencia condenatoria.
Es verdad que el devastador panorama al que se enfrenta la niñez en México no es nada nuevo, es una constante que ha venido incrementando desde hace más de una década y en eso tiene mucho que ver la guerra contra el narcotráfico. Desde 2006 a 2019, el crimen organizado ha cobrado la vida de más de 16 mil niñas, niños y adolescentes. La red reportó que de 2015 a marzo del 2019 suman 4,299 homicidios dolosos, en su mayoría con arma de fuego. Realidad que se vuelve aún más oscura si a esas cifras se añaden los 7 mil casos de desaparecidos.
Los niños, niñas y adolescentes son conscientes del complicado panorama al que se enfrentan en México. Prueba de ello son los resultados de la Consulta Infantil y Juvenil (CIJ) realizada por el Instituto Nacional Electoral (INE) a finales de 2018 con la participación de 5 millones 671 mil 384 menores de 6 a 17 años.
Esta consulta fue realizada por primera vez en 1997 por el entonces Instituto Federal Electoral y desde entonces cuenta con el apoyo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF); el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna).
Los resultados revelan que la violencia física, verbal y sexual hacia menores en México se ha agravado. Según los datos, los menores más violentados física o verbalmente están entre 6 y 9 años, pues 50.7% de los niños y 46.4 % de las niñas dijeron haber recibido golpes. La consulta expone también la percepción a otros tipos de violencia y cierra con una sección en la que los menores podían dar propuestas para tener “un mejor México”.
Entre las propuestas de los niños entre 6 y 9 años destacan: mayor cuidado a las niñas y los niños, mejores escuelas, mayor seguridad y que el gobierno no robe. El grupo de menores de entre 10 y 13 años pidió: erradicar la violencia, seguridad para la infancia y más igualdad. Mientras que el grupo de los 14 a los 17 años, coincidió en erradicar la violencia y sumó la opción de tener calles más seguras.
El Gobierno debe actuar
El gobierno actual tiene apenas cuatro meses al frente de México. Sin embargo, el impacto por la crisis de violencia habla por sí sola, y es urgente implementar medidas para proteger a este, uno de los grupos más vulnerables de la población: los niños, niñas y jóvenes. Para ello, entre otras cosas, se debe fortalecer el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), además de inversión pública para la niñez y adolescencia.
El 30 de abril de 2018, Andrés Manuel López Obrador, entonces candidato presidencial, firmó un compromiso #MXporLaNiñez, en el que señaló como prioridad atender el tema de seguridad de los niños. Es necesario que el gobierno actual retome el compromiso para garantizar los derechos de la niñez.
Santiago tenía tan sólo un año cuando fue asesinado. El pequeño fue una de las víctimas de la masacre en Minatitlán, Veracruz el pasado 19 de abril. Junto a su familia, se encontraba en una celebración de cumpleaños cuando un grupo de hombres ingresaron al lugar y abrieron fuego en contra de los asistentes. La imagen de Santiago tendido en el suelo, con su playerita amarilla manchada de sangre, no tardó en circular en redes sociales y junto a ella una pequeña muestra de la cruel realidad a la que se enfrentan los niños en México debido a la crisis de violencia por la que atraviesa el país.
Tan sólo en el primer trimestre del 2019, se registraron 285 homicidios dolosos en los que la víctima tenía de cero a 17 años. Es decir, 3.2 homicidios diarios, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), un panorama bastante grave respecto al que la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) exhortó al gobierno federal a tomar acciones y poner especial atención a mejorar la calidad de vida de los niños, niñas y jóvenes mexicanos.
De acuerdo con el informe de la Red sobre incidencia delictiva y violencia contra niñas, niños y adolescentes en México 2015-2019, se registraron cuatro mil 299 víctimas de homicidio doloso contra dicho sector de la sociedad, cantidad que representa cerca del 4% del total de víctimas de este delito. Por otro lado, los estados más violentos fueron Guanajuato, donde se registró el mayor número de asesinatos contra menores varones, nueve de cada 10 casos; Veracruz y Nuevo León. La REDIM detalló que en lo que va del 2019 se han registrado, al menos, 29 feminicidios de niñas y adolescentes.
Juan Martín Pérez García, director ejecutivo de la REDIM, urgió a que el estado establezca una estrategia de prevención y atención a la violencia contra niños, niñas y adolescentes, con apoyo de expertos internacionales y sociedad civil; sustentada en la ley, con responsables institucionales, y presupuesto, pues, destacó que de cada 100 carpetas de investigación donde las víctimas son niñas, niños o adolescentes, solo hay una sentencia condenatoria.
Es verdad que el devastador panorama al que se enfrenta la niñez en México no es nada nuevo, es una constante que ha venido incrementando desde hace más de una década y en eso tiene mucho que ver la guerra contra el narcotráfico. Desde 2006 a 2019, el crimen organizado ha cobrado la vida de más de 16 mil niñas, niños y adolescentes. La red reportó que de 2015 a marzo del 2019 suman 4,299 homicidios dolosos, en su mayoría con arma de fuego. Realidad que se vuelve aún más oscura si a esas cifras se añaden los 7 mil casos de desaparecidos.
Los niños, niñas y adolescentes son conscientes del complicado panorama al que se enfrentan en México. Prueba de ello son los resultados de la Consulta Infantil y Juvenil (CIJ) realizada por el Instituto Nacional Electoral (INE) a finales de 2018 con la participación de 5 millones 671 mil 384 menores de 6 a 17 años.
Esta consulta fue realizada por primera vez en 1997 por el entonces Instituto Federal Electoral y desde entonces cuenta con el apoyo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF); el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna).
Los resultados revelan que la violencia física, verbal y sexual hacia menores en México se ha agravado. Según los datos, los menores más violentados física o verbalmente están entre 6 y 9 años, pues 50.7% de los niños y 46.4 % de las niñas dijeron haber recibido golpes. La consulta expone también la percepción a otros tipos de violencia y cierra con una sección en la que los menores podían dar propuestas para tener “un mejor México”.
Entre las propuestas de los niños entre 6 y 9 años destacan: mayor cuidado a las niñas y los niños, mejores escuelas, mayor seguridad y que el gobierno no robe. El grupo de menores de entre 10 y 13 años pidió: erradicar la violencia, seguridad para la infancia y más igualdad. Mientras que el grupo de los 14 a los 17 años, coincidió en erradicar la violencia y sumó la opción de tener calles más seguras.
El Gobierno debe actuar
El gobierno actual tiene apenas cuatro meses al frente de México. Sin embargo, el impacto por la crisis de violencia habla por sí sola, y es urgente implementar medidas para proteger a este, uno de los grupos más vulnerables de la población: los niños, niñas y jóvenes. Para ello, entre otras cosas, se debe fortalecer el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), además de inversión pública para la niñez y adolescencia.
El 30 de abril de 2018, Andrés Manuel López Obrador, entonces candidato presidencial, firmó un compromiso #MXporLaNiñez, en el que señaló como prioridad atender el tema de seguridad de los niños. Es necesario que el gobierno actual retome el compromiso para garantizar los derechos de la niñez.
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