Hace un par de años, Alfonso Herrera recibió una propuesta del productor Claudio Carrera: protagonizar la primera puesta en escena en el país de La sociedad de los poetas muertos, un texto basado en el guion del ganador del Oscar Tom Schulman. La idea era apasionante y se construyó un sólido equipo para esta producción, liderado por el director y cineasta Francisco Franco. Sin embargo, un tema de derechos de autor detuvo a la compañía que ya estaba en proceso de ensayos. A finales de 2017 y casi por arte de magia, el nudo se desató y el mismo equipo volvió a escena con una meta: estrenar temporada el 5 de abril de 2018, en el recién remodelado Nuevo Teatro Libanés.

Esta obra de teatro, cuya versión cinematográfica dirigió Peter Weir con Robin Williams en 1989, narra la historia de un grupo de estudiantes de preparatoria que encuentra en su profesor de literatura, John Keating, una fuente de inspiración y rebeldía que los ayuda a encontrar su propio camino y romper con las rígidas normas sociales que los sofocan. Keating, por su parte, busca devolver a la academia la pasión por la vida que encontró entre sus muros.

Parte del elenco juvenil de «La sociedad de los poetas muertos».

“Es un profesor que intenta sensibilizar a los estudiantes con poesía, literatura”, dice en entrevista Alfonso Herrera, quien interpretará a este personaje. “Me parece fascinante cómo los va sensibilizando, creo que ese es el punto: sensibilizar no sólo a los estudiantes, sino poco a poco también al espectador.”

Considerada un clásico contemporáneo, La sociedad de los poetas muertos ha inspirado a generaciones de adolescentes que encuentran entre los personajes un reflejo de su realidad. Para interpretar a los estudiantes de la Academia Welton, Francisco Franco seleccionó a un grupo de jóvenes actores que ya han mostrado su talento en el cine, el teatro y la televisión, entre los que destacan Paco Rueda, Sebastián Aguirre, Alejandro Puente, Gonzalo Vega Jr., Mauro Sánchez Navarro y Germán Braco. Aunque ellos tienen asignados personajes específicos, durante la temporada estos chicos intercambiarán roles en un juego que hará de cada función una experiencia única. “Nadie va a ponerse en una zona de confort”, explica Alfonso Herrera. “Será interesante para nosotros mismos, para no encasillarte con una cara. Le va a dar mucha vida y mucho aire.”

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Una de las frases icónicas de esta historia es carpe diem, del latín, que literalmente significa “aprovecha el día” y que se convierte en una suerte de himno de batalla para los estudiantes de Keating. Herrera —quien ha desarrollado una sólida carrera en la televisión en México y Estados Unidos— dice que el significado de esta expresión está en la posibilidad de mirar atrás para seguir adelante. “Honrar tu pasado y disfrutar tu presente. Para mí es honrar lo que fuiste, las experiencias que has tenido, para disfrutar plenamente lo que tienes.”

En la coyuntura electoral del país, esta puesta en escena invita a la reflexión, ante los retos y paradigmas cotidianos. “¿Qué es más valioso o qué es mejor?, ¿un abogado que lee poesía o uno que no?, ¿un político que está sensibilizado o uno que no? Probablemente su conciencia sea diferente al momento de hacer las cosas y al momento de llevar a cabo su profesión”, dice Herrera.

Nunca es tarde para dejarse inspirar, para ser un librepensador. “Habrá que inspirarnos por nosotros mismos. Honrar nuestro pasado y disfrutar lo que somos”, concluye el actor.

Alfonso Herrera interpreta al profesor John Keating en la puesta mexicana en el recién remodelado Teatro Libanés.

La sociedad de los poetas muertos
A partir del 5 de abril
Nuevo Teatro Libanés
Barranca del Muerto, Crédito Constructor