En Boca, los objetivos dictan: “el postre va primero y después pueden irse a comer”. Y es que Boca es un restaurante exclusivo de postres, una propuesta como ninguna otra en la Ciudad de México.
“Todo inició cuando regresé de estudiar de España —del EspaiSucre, en Barcelona, la única escuela pastelera del mundo—, allá la cultura del postre se da todas horas y las pastelerías siempre están llenas, entonces pensé que en México la cocina es reconocida a nivel internacional, pero la pastelería hay que empezar a empujarla”, comenta Roberto Gutiérrez Mohedano, chef y propietario de Boca.
Entonces, Roberto comenzó a trabajar en el proyecto. Su propuesta no se enfoca en una pastelería mexicana como tal (porque no existe tal cosa) pero sí utiliza ingredientes nacionales que mezcla para crear sabores extravagantes: creaciones como el cheesecake de queso de cabra, el pastel de mango con albahaca y queso feta o la tarta de yogurt griego con frambuesa y pimienta rosa.
“Recibimos la fruta en la mañana y montamos un menú fresco con las opciones de temporada: mango, guayaba… La idea era cambiar la carta todos los días, pero también la gente busca sus postres favoritos, así que si tenemos 12 opciones, aunque sabemos que 3 o 4 cambiarán por la temporada, para tener nuevos sabores”.
Aquí el maridaje es casi tan importante como el postre, pues con la elección ellos recomiendan las mejores opciones, desde infusiones, café o chocolate mexicano, hasta vino y cervezas artesanales.
Entre los favoritos del menú están los postres de cítricos con gin tonic; el pastel de romero, durazno y crema de limón; el de frambuesa, lavanda y jamaica, así como el de chocolate con maracuyá. Y otros con sabores aún más exóticos, así que no sería raro que en una de las visitas encuentres postres con vinagre balsámico, jitomate, mezcal, romero y vainilla ahumada.
*Texto publicado originalmente en Local.mx.
No items found.
No items found.
No items found.
No items found.
Cheesecake de queso de cabra, pastel de mango con albahaca y queso feta, o la tarta de yogurt griego y pimienta rosa, por ejemplo…
En Boca, los objetivos dictan: “el postre va primero y después pueden irse a comer”. Y es que Boca es un restaurante exclusivo de postres, una propuesta como ninguna otra en la Ciudad de México.
“Todo inició cuando regresé de estudiar de España —del EspaiSucre, en Barcelona, la única escuela pastelera del mundo—, allá la cultura del postre se da todas horas y las pastelerías siempre están llenas, entonces pensé que en México la cocina es reconocida a nivel internacional, pero la pastelería hay que empezar a empujarla”, comenta Roberto Gutiérrez Mohedano, chef y propietario de Boca.
Entonces, Roberto comenzó a trabajar en el proyecto. Su propuesta no se enfoca en una pastelería mexicana como tal (porque no existe tal cosa) pero sí utiliza ingredientes nacionales que mezcla para crear sabores extravagantes: creaciones como el cheesecake de queso de cabra, el pastel de mango con albahaca y queso feta o la tarta de yogurt griego con frambuesa y pimienta rosa.
“Recibimos la fruta en la mañana y montamos un menú fresco con las opciones de temporada: mango, guayaba… La idea era cambiar la carta todos los días, pero también la gente busca sus postres favoritos, así que si tenemos 12 opciones, aunque sabemos que 3 o 4 cambiarán por la temporada, para tener nuevos sabores”.
Aquí el maridaje es casi tan importante como el postre, pues con la elección ellos recomiendan las mejores opciones, desde infusiones, café o chocolate mexicano, hasta vino y cervezas artesanales.
Entre los favoritos del menú están los postres de cítricos con gin tonic; el pastel de romero, durazno y crema de limón; el de frambuesa, lavanda y jamaica, así como el de chocolate con maracuyá. Y otros con sabores aún más exóticos, así que no sería raro que en una de las visitas encuentres postres con vinagre balsámico, jitomate, mezcal, romero y vainilla ahumada.
*Texto publicado originalmente en Local.mx.
Cheesecake de queso de cabra, pastel de mango con albahaca y queso feta, o la tarta de yogurt griego y pimienta rosa, por ejemplo…
En Boca, los objetivos dictan: “el postre va primero y después pueden irse a comer”. Y es que Boca es un restaurante exclusivo de postres, una propuesta como ninguna otra en la Ciudad de México.
“Todo inició cuando regresé de estudiar de España —del EspaiSucre, en Barcelona, la única escuela pastelera del mundo—, allá la cultura del postre se da todas horas y las pastelerías siempre están llenas, entonces pensé que en México la cocina es reconocida a nivel internacional, pero la pastelería hay que empezar a empujarla”, comenta Roberto Gutiérrez Mohedano, chef y propietario de Boca.
Entonces, Roberto comenzó a trabajar en el proyecto. Su propuesta no se enfoca en una pastelería mexicana como tal (porque no existe tal cosa) pero sí utiliza ingredientes nacionales que mezcla para crear sabores extravagantes: creaciones como el cheesecake de queso de cabra, el pastel de mango con albahaca y queso feta o la tarta de yogurt griego con frambuesa y pimienta rosa.
“Recibimos la fruta en la mañana y montamos un menú fresco con las opciones de temporada: mango, guayaba… La idea era cambiar la carta todos los días, pero también la gente busca sus postres favoritos, así que si tenemos 12 opciones, aunque sabemos que 3 o 4 cambiarán por la temporada, para tener nuevos sabores”.
Aquí el maridaje es casi tan importante como el postre, pues con la elección ellos recomiendan las mejores opciones, desde infusiones, café o chocolate mexicano, hasta vino y cervezas artesanales.
Entre los favoritos del menú están los postres de cítricos con gin tonic; el pastel de romero, durazno y crema de limón; el de frambuesa, lavanda y jamaica, así como el de chocolate con maracuyá. Y otros con sabores aún más exóticos, así que no sería raro que en una de las visitas encuentres postres con vinagre balsámico, jitomate, mezcal, romero y vainilla ahumada.
*Texto publicado originalmente en Local.mx.
Cheesecake de queso de cabra, pastel de mango con albahaca y queso feta, o la tarta de yogurt griego y pimienta rosa, por ejemplo…
En Boca, los objetivos dictan: “el postre va primero y después pueden irse a comer”. Y es que Boca es un restaurante exclusivo de postres, una propuesta como ninguna otra en la Ciudad de México.
“Todo inició cuando regresé de estudiar de España —del EspaiSucre, en Barcelona, la única escuela pastelera del mundo—, allá la cultura del postre se da todas horas y las pastelerías siempre están llenas, entonces pensé que en México la cocina es reconocida a nivel internacional, pero la pastelería hay que empezar a empujarla”, comenta Roberto Gutiérrez Mohedano, chef y propietario de Boca.
Entonces, Roberto comenzó a trabajar en el proyecto. Su propuesta no se enfoca en una pastelería mexicana como tal (porque no existe tal cosa) pero sí utiliza ingredientes nacionales que mezcla para crear sabores extravagantes: creaciones como el cheesecake de queso de cabra, el pastel de mango con albahaca y queso feta o la tarta de yogurt griego con frambuesa y pimienta rosa.
“Recibimos la fruta en la mañana y montamos un menú fresco con las opciones de temporada: mango, guayaba… La idea era cambiar la carta todos los días, pero también la gente busca sus postres favoritos, así que si tenemos 12 opciones, aunque sabemos que 3 o 4 cambiarán por la temporada, para tener nuevos sabores”.
Aquí el maridaje es casi tan importante como el postre, pues con la elección ellos recomiendan las mejores opciones, desde infusiones, café o chocolate mexicano, hasta vino y cervezas artesanales.
Entre los favoritos del menú están los postres de cítricos con gin tonic; el pastel de romero, durazno y crema de limón; el de frambuesa, lavanda y jamaica, así como el de chocolate con maracuyá. Y otros con sabores aún más exóticos, así que no sería raro que en una de las visitas encuentres postres con vinagre balsámico, jitomate, mezcal, romero y vainilla ahumada.
*Texto publicado originalmente en Local.mx.
Cheesecake de queso de cabra, pastel de mango con albahaca y queso feta, o la tarta de yogurt griego y pimienta rosa, por ejemplo…
En Boca, los objetivos dictan: “el postre va primero y después pueden irse a comer”. Y es que Boca es un restaurante exclusivo de postres, una propuesta como ninguna otra en la Ciudad de México.
“Todo inició cuando regresé de estudiar de España —del EspaiSucre, en Barcelona, la única escuela pastelera del mundo—, allá la cultura del postre se da todas horas y las pastelerías siempre están llenas, entonces pensé que en México la cocina es reconocida a nivel internacional, pero la pastelería hay que empezar a empujarla”, comenta Roberto Gutiérrez Mohedano, chef y propietario de Boca.
Entonces, Roberto comenzó a trabajar en el proyecto. Su propuesta no se enfoca en una pastelería mexicana como tal (porque no existe tal cosa) pero sí utiliza ingredientes nacionales que mezcla para crear sabores extravagantes: creaciones como el cheesecake de queso de cabra, el pastel de mango con albahaca y queso feta o la tarta de yogurt griego con frambuesa y pimienta rosa.
“Recibimos la fruta en la mañana y montamos un menú fresco con las opciones de temporada: mango, guayaba… La idea era cambiar la carta todos los días, pero también la gente busca sus postres favoritos, así que si tenemos 12 opciones, aunque sabemos que 3 o 4 cambiarán por la temporada, para tener nuevos sabores”.
Aquí el maridaje es casi tan importante como el postre, pues con la elección ellos recomiendan las mejores opciones, desde infusiones, café o chocolate mexicano, hasta vino y cervezas artesanales.
Entre los favoritos del menú están los postres de cítricos con gin tonic; el pastel de romero, durazno y crema de limón; el de frambuesa, lavanda y jamaica, así como el de chocolate con maracuyá. Y otros con sabores aún más exóticos, así que no sería raro que en una de las visitas encuentres postres con vinagre balsámico, jitomate, mezcal, romero y vainilla ahumada.
*Texto publicado originalmente en Local.mx.
En Boca, los objetivos dictan: “el postre va primero y después pueden irse a comer”. Y es que Boca es un restaurante exclusivo de postres, una propuesta como ninguna otra en la Ciudad de México.
“Todo inició cuando regresé de estudiar de España —del EspaiSucre, en Barcelona, la única escuela pastelera del mundo—, allá la cultura del postre se da todas horas y las pastelerías siempre están llenas, entonces pensé que en México la cocina es reconocida a nivel internacional, pero la pastelería hay que empezar a empujarla”, comenta Roberto Gutiérrez Mohedano, chef y propietario de Boca.
Entonces, Roberto comenzó a trabajar en el proyecto. Su propuesta no se enfoca en una pastelería mexicana como tal (porque no existe tal cosa) pero sí utiliza ingredientes nacionales que mezcla para crear sabores extravagantes: creaciones como el cheesecake de queso de cabra, el pastel de mango con albahaca y queso feta o la tarta de yogurt griego con frambuesa y pimienta rosa.
“Recibimos la fruta en la mañana y montamos un menú fresco con las opciones de temporada: mango, guayaba… La idea era cambiar la carta todos los días, pero también la gente busca sus postres favoritos, así que si tenemos 12 opciones, aunque sabemos que 3 o 4 cambiarán por la temporada, para tener nuevos sabores”.
Aquí el maridaje es casi tan importante como el postre, pues con la elección ellos recomiendan las mejores opciones, desde infusiones, café o chocolate mexicano, hasta vino y cervezas artesanales.
Entre los favoritos del menú están los postres de cítricos con gin tonic; el pastel de romero, durazno y crema de limón; el de frambuesa, lavanda y jamaica, así como el de chocolate con maracuyá. Y otros con sabores aún más exóticos, así que no sería raro que en una de las visitas encuentres postres con vinagre balsámico, jitomate, mezcal, romero y vainilla ahumada.
*Texto publicado originalmente en Local.mx.
No items found.