Del grano a la taza: los puentes de Nespresso
Éste es el lado humano de Nespresso, que a través de una producción consciente lleva a la práctica una filosofía sustentable e inspira al mundo a seguir este camino.
Para millones de personas la primera taza de café es clave para iniciar el día. El aroma que despide una cafetera recién hecha es una promesa de que realmente pisaremos el mundo de los vivos, de los despiertos, de los que estamos presentes, aquí y ahora, a cada sorbo.
El café es fundamental para que funcione el mundo y también una pieza fundamental para las comunidades que lo cultivan, así como para todos aquellos involucrados en la cadena de valor de su producción. México es una parte importante en este camino del grano a la taza. En los ochenta éramos el cuarto productor mundial, pero muchas cosas han pasado desde entonces, entre ellas, la caída en picada de los precios del grano de café, la prevalencia del hongo de la roya en las plantaciones y los efectos del cambio climático, que han provocado el abandono de los cultivos como alternativa a vender por debajo del precio de producción. Hoy ocupamos el sitio número once entre los principales países productores y, de acuerdo con el Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable de la Cámara de Diputados, Chiapas es el estado que domina la producción nacional, con 46.1%, seguido de Veracruz, Puebla, Oaxaca y Guerrero.
¿Qué tienen en común los estados cafetaleros de México? Además de compartir cualidades climáticas muy específicas, necesarias para que crezca la planta del café —una especie que requiere altitudes superiores a los mil metros sobre el nivel del mar, grandes cantidades de lluvia y una temperatura que no baje de los 13 °C ni suba de los 26 °C—, son también estados que arrastran históricamente altos niveles de marginación social y desigualdad. Según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, la industria cafetalera empleaba, en 2019, a 515 000 personas, de las cuales 85% era población indígena.
Las comunidades cafetaleras de México se hermanan con otros pueblos productores de café en los enormes retos que enfrentan; de allí la importancia de políticas críticas que surjan de la alianza entre la iniciativa privada y las organizaciones sin fines de lucro. Un gran ejemplo son las acciones de Nespresso en materia de sustentabilidad y colaboración con las poblaciones cafetaleras, de las que obtiene la materia prima para su marca de café en cápsulas, y que parten de la idea de que la lealtad y las relaciones a largo plazo con los cafeticultores son la base para hacer la diferencia, para hacer de la industria una herramienta para el cambio.
El Programa Nespresso AAA Sustainable Quality surgió en 2003 en conjunto con la Rainforest Alliance. Comenzó con trescientos cafeticultores y hoy cuenta con más de 110 000 en quince países, incluido México. Contempla tres ejes de trabajo con las comunidades caficultoras. El primero es el empoderamiento a los trabajadores para que puedan implementar prácticas que generen alta calidad con métodos sustentables. El segundo es colaborar con las comunidades para generar soluciones ante amenazas de alto riesgo, como el cambio climático. El tercero es la búsqueda de mejores respuestas a cuestiones sistémicas, a través de relaciones con otras organizaciones, la academia y gobiernos locales y nacionales para generar un cambio en la industria global de café.
El programa AAA contempla dar a los cafeticultores el apoyo de cientos de agrónomos que trabajan con ellos en el campo y se ha convertido en una herramienta indispensable para la adopción de prácticas sustentables. Además, los productores tienen la posibilidad de obtener una certificación a través de la Rainforest Alliance o Fairtrade International que les da el respaldo y reconocimiento global por su respeto a estándares de producción de carbono.
Hay también una rama cuantitativa que, de la mano de la Red de Agricultura Sustentable, es responsable de monitorizar y evaluar muestras de cada cultivo para identificar vacíos en la aplicación de estas prácticas o en la calidad del café, la productividad de las plantaciones, el bienestar social de los caficultores y el cuidado de su nivel de vida, así como la protección del medio ambiente.
El programa ha hecho posible medir, por ejemplo, el nivel de capacitación de los caficultores de cada país en donde opera; la calidad del agua de las plantaciones y la cantidad de agua disponible para las comunidades; la cantidad de fertilizantes o sustancias tóxicas que se utilizan en los cultivos; así como las características sociodemográficas de las poblaciones involucradas en la siembra y recolección del café. Por ejemplo, del Reporte de Impacto del Programa Nespresso AAA (2010–2020) se desprenden datos como que 62% de los cafeticultores veracruzanos son hombres, pero 80% de sus esposas y 71% de sus hijos adultos participan en actividades de cultivo. En estos hogares 50% del ingreso proviene del café. El reporte presenta estas “fotografías instantáneas” que dan cuenta del panorama de la industria y de las familias que la hacen posible. Hoy más de 80% del café de la prestigiosa firma proviene de cultivos que están dentro de este programa, que contempla primas para los productores de entre 30% y 40% encima de los precios del mercado y de entre 10% y 15% encima del precio de los cafés de calidad similar. Además, desde 2019 todas las fincas con las que colabora Nespresso en Veracruz son parte del programa AAA y cuentan con la certificación de Rainforest Alliance.
Adicionalmente, Nespresso trabaja con otras instituciones para analizar el riesgo de la volatilidad de los precios del grano. Junto con el Centro de Inteligencia sobre Mercados Sostenibles de la Escuela de Negocios INCAE en Costa Rica, presentó un programa de investigación innovador para contar pérdidas y ganancias de las explotaciones de cinco países de Amé- rica Central y América del Sur. La investigación incluye mejoras en la calidad y rendimiento, así como el uso de agricultura de precisión para reducir inversiones costosas. Al tener plantaciones más productivas, éstas se vuelven también más rentables y, a través de este tipo de iniciativas, se obtiene, al mismo tiempo, una mayor transparencia en los precios.
Este nivel de atención al detalle está orientado a reconocer que nuestras acciones tienen un impacto en los demás. Nespresso, como embajador de esta filosofía, pone en el centro de sus procesos una conciencia social y ambiental y la intención de inspirar con el ejemplo a generar lazos sólidos con las comunidades de las que se sirve y nutrirse de experiencias humanas sanas y sustentables.
Recomendaciones Gatopardo
Más historias que podrían interesarte.