La leyenda de La Planchada existe en México desde el siglo pasado. Aunque hay variaciones, la historia es esta: una enfermera de nombre Eulalia, que trabajaba en un hospital de la Ciudad de México a inicios del siglo XX, era prolija con su aspecto y con su trabajo, pero es aquí en donde se enamora de un médico y la historia toma camino. Comienzan una relación y se comprometen, pero el médico debe cambiar de hospital. Esto pone punto final a su romance y, al final, él termina casándose con otra mujer. El amor no correspondido afecta demasiado a Eulalia, que descuida a sus pacientes y muere poco después de ser internada en el hospital donde trabajaba, debido al mal estado en que se encontraba tras la ruptura amorosa. Desde entonces, su fantasma aparece, según unas versiones, para cuidar de sus pacientes; en otras, para matarlos.

Turno nocturno, la mirada de Rigoberto Castañeda en la leyenda de La Planchada

Ahora a finales de 2024 se estrena Turno nocturno, una película que aborda la leyenda de esta enfermera.

“Como mucha gente, es una historia que conozco desde hace muchísimos años”, cuenta Rigoberto Castañeda, director de Turno nocturno, en entrevista para Gatopardo. “Pero como tal retomé la historia cuando estaba haciendo algún scouting, probablemente para [la serie] Paramédicos (2012), y fuimos a dar al Hospital Juárez, que está en la Ciudad de México. Ahí fue una de las primeras veces que me dijeron ‘La Planchada es de aquí, La Planchada es de este hospital’. Ya después me topé con varios hospitales que se quieren adjudicar la verdadera historia. Pero ahí la reencontré y desde ese momento dije: ‘Ah, claro. Esto es una gran leyenda’”.

Castañeda dice que siempre ha querido llevar a la pantalla distintos personajes de la mitología popular mexicana. “Hay muchísimas historias, leyendas, mitos, de brujos, de brujas, de fantasmas y de monstruos que no han llegado nunca a la pantalla grande, es un nicho que está totalmente vacío. Hay muy pocos ejemplos en ello nos tendríamos que remontar al cine de los años treinta, cuarenta, cincuenta, como para encontrar los máximos exponentes de esa mitología”, explica.

Escribir desde el hospital: el guion de Turno nocturno

Castañeda se unió a Fernando Pérez Gavilán y Santiago García Galván, de Feel Good Films, para crear un nuevo sello de producción especializado en el género de terror, al que han bautizado como Cinequiátrico La Castañeda. Turno Nocturno es el primer título de este sello; La Planchada, el primer fantasma mexicano que llevará al cine.

“La Planchada no tiene un antecedente en la historia del nacional. Es un personaje muy icónico”, dice el director.

Empezó a construir la historia de Turno nocturno desde 2016. Aunque tiempo después la dejó a un lado; fue un problema de salud lo que hizo retomarla. En mayo 2021, el director mexicano fue hospitalizado de emergencia debido a un sangrado intestinal y mientras estuvo internado escribió la primera versión del guion.

“Allí tomé mucho para esta historia, me di a la tarea de platicar con enfermeras, doctores, camilleros y demás de dentro de la industria de la salud. Fue cuando agarró forma el guion, cuando el tema acabó de aterrizar dentro de la anécdota y se convirtió en algo más”, cuenta el director.

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“El primer doctor que me atendió fue un gastroenterólogo. Se llama Arturo. Muy joven, muy amable. Nos hicimos amigos. Le empecé hacer preguntas sobre cómo es trabajar en un hospital, de qué es estar en el turno nocturno. Él fue mi principal guía durante un buen trecho del proceso de escritura”, dice el director de Kilómetro 31 (2006).

Una de las primeras cosas de las que se percató Castañeda fue de las posibilidades iconográficas de esta enfermera fantasma: “Si te das cuenta, la gran mayoría de los monstruos, fantasmas y entidades del mundo paranormal que se llevan a muñequitos, a posters, películas y demás son muy iconográficos: Freddy Krueger, Jason, Michael Myers, el mismo Art the Clown, que está tan de moda ahorita. Todos son increíblemente fáciles de recordar; la memoria visual es muy importante, y sentía que La Planchada tenía eso”.

A la hora de escribir Turno nocturno, Castañeda intentó hacer referencias a otras historias de terror que también suceden dentro de hospitales. “Volteé a ver, por ejemplo, Frágiles (2005)”, cuenta. “Lo que intentaba buscar era ver si había similitudes, y escapar de esas similitudes”.

La película se filmó en la Ciudad de México, en unas instalaciones del Centro Médico Nacional Siglo XXI que están abandonadas desde el sismo de 1985 debido a que quedaron dañadas en su estructura y no pudieron restaurarse para dar servicio. “Fue todo un proceso de convencer y de tramitar; convencer a todos los involucrados de que era una gran opción filmar ahí, y de tramitar los permisos necesarios para poder hacerlo”, cuenta el director.

El lugar resultó idóneo para la filmación, explica, pues cuenta con la estructura de un hospital antiguo que iba de la mano con la narrativa. Se ambientaron un par de pisos del edificio para crear oficinas, habitaciones, salas de espera, espacios para enfermeras, quirófanos. Todo con un aspecto y distribución que se adecuara a la década de los setenta, ya que la historia se desarrolla en 1979.

“Era reconstruir un Frankenstein, fue muy divertido. La intención fue recrear lo que era este edificio en el Centro Médico [Nacional] Siglo XXI, en aquel entonces en el 85, pero también abrir la ventana que pudiera ser cualquier tipo de hospital. Sobre todo, queríamos capturar el espíritu de la época”, dice Castañeda. “Nunca había vivido una experiencia así. Toda la película fue filmada en esa locación”.

La historia de Turno nocturno aborda la historia de Rebeca (interpretada por Paulina Gaitán), una enfermera que comienza un periodo de prueba durante el turno nocturno de un hospital público. Las reglas que le dan son claras: “Que nada se te olvide. No te distraigas. No te relaciones con el personal. No te duermas nunca”. Sin embargo, no podrá cumplirlas porque ella no es una enfermera cualquiera: tiene vínculos misteriosos con el hospital que poco a poco se irán relevando a lo largo de la película en sus encuentros con Eulalia (Fernanda Echavarría), el fantasma de una enfermera que se aparece todas las noches por los pasillos del hospital.

La película se filmó en la Ciudad de México, en instalaciones del Centro Médico Nacional Siglo XXI que están abandonadas desde el sismo de 1985.

La película busca representar fielmente la época en que está ambientada, no solo en los escenarios, sino también recreando las dinámicas que existían antes en los hospitales.

“Cuando comenzamos la preproducción le hablé a Arturo y le dije: ‘ven a trabajar con nosotros, para asesorarnos’. Él hizo trabajo de investigación sobre la época, sobre los aparatos médicos que se usaban entonces, cosas súper técnicas. También vino su novia, que es enfermera”, dice Castañeda.

“En el caso de Paulina (Gaitán) hubo un trabajo muy arduo, incluso se metió a trabajar de enfermera, quien nos estaba apoyando se la llevó a sus turnos para que aprendiera de primera mano lo que es ser una enfermera, cómo agarrar una jeringa, cómo agarrar un bisturí. Aprender también cómo te habla un doctor, cómo se le responde”.

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Además de Paulina Gaitán, como protagonista, el reparto de Turno nocturno se integra por los actores Fernanda Echevarría del Rivero, Tony Dalton, Azul Guaita, Iazúa Larios, Enoc Leaño, Adriana Llabrés, Paty Maqueo y Patricia Reyes Spíndola.

Pero no todos son fantasmas y sucesos sobrenaturales, en su nueva película Rigoberto Castañeda cuenta más de una historia de terror. Dentro de la cinta se abordan las dinámicas machistas que se viven en los hospitales, donde las enfermeras son víctimas de acoso y violencia.

“Es complejo hablar sobre el tema, siendo yo un hombre. Si me atrevo a hablar de ello es porque creo que todos lo debemos de hablar. Es importante hablar sobre ello. Me educaron y nací siendo macho; ahora me estoy dando cuenta de que yo traigo muchas cosas culturalmente que debo corregir”, confiesa el director.

“Hago un cine comercial. Sí me interesa llegar a muchas personas; entre más personas vean mis historias, mejor. Y qué mejor que utilizar esta plataforma para abordar un tema así de importante y profundo”. Y agrega que “no todos los horrores son fantasmas, muchas veces el verdadero terror está en las dinámicas humanas”.

El cine de terror en México: ¿un género visto hacia abajo?

Desde su primera película Kilómetro 31 (2006), Castañeda se ha dedicado al género del terror y suspenso con las películas Atrapados (2008) y Sin origen (2020), y espera seguir haciéndolo.

“El horror siempre ha sido visto como algo menor, como un subproducto. Sin duda poco a poco se ha ido cambiado ese prejuicio, pero todavía sigue, lo veo, lo he escuchado”, cuenta.

Por ejemplo, dice, sucede cuando se aplica para los estímulos del EFICINE, que significan un gran apoyo para financiar proyectos cinematográficos: “Te acabas enterando de que hubo alguien dentro del jurado que dice ‘esas películas yo no las entiendo’, ‘esas películas yo no las veo’, ‘ese tipo de cine a mí no me gusta’. Cada año hay esos comentarios”.

Para enfrentar estos prejuicios considera necesario que se apueste por el terror realizado en México. “De pronto tenemos esa tendencia a voltear a ver lo que hacen en todo el mundo, pero también creo necesario voltear a mirarnos hacia nosotros, voltear y ver nuestra cultura como algo importante y algo que vale la pena contar”, finaliza.

¿Cuándo se estrena en México la nueva película de Rigoberto Castañeda, Turno nocturno?

Turno nocturno se estrenará en cines mexicanos el 5 de diciembre, luego de haberse presentado en el Festival Internacional de Cine de Morelia y en la 17a edición de Mórbido Film Fest, en la Ciudad de México.

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