En Venezuela, donde no hay espacio para la disidencia, los medios sortean todo tipo de restricciones y censura. En plena pandemia sobreviven diecinueve diarios impresos de los 130 que circulaban hace siete años. Así aparece El Bus TV, un grupo de periodistas que, con un altoparlante, en autobuses o desde los balcones de los barrios más precarios, llevan a la gente las noticias que escapan del discurso oficial.
En Venezuela, donde no hay espacio para la disidencia, los medios sortean todo tipo de restricciones y censura. En plena pandemia sobreviven diecinueve diarios impresos de los 130 que circulaban hace siete años. Así aparece El Bus TV, un grupo de periodistas que, con un altoparlante, en autobuses o desde los balcones de los barrios más precarios, llevan a la gente las noticias que escapan del discurso oficial.
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